El Ministerio de Salud Pública (Minsap) de Cuba ha actualizado sus protocolos para los viajeros que llegan a la isla, flexibilizando algunas de las restricciones previas relacionadas con la COVID-19. Según el doctor Carmelo Trujillo, un directivo del Minsap, los viajeros que lleguen a Cuba ya no necesitarán presentar una prueba negativa de COVID-19, independientemente de su país de origen o su estado de vacunación.
Esta medida representa un cambio significativo en las políticas de salud pública de Cuba en relación con la pandemia. Sin embargo, el Minsap mantiene ciertas precauciones, especialmente para aquellos viajeros que muestren síntomas respiratorios a su llegada. En estos casos, se realizarán pruebas rápidas de COVID-19 o se tomarán muestras para PCR para asegurar la detección temprana y el tratamiento adecuado de cualquier caso positivo.
Además, los viajeros procedentes de países con transmisión activa de fiebre amarilla, como Angola y Brasil, deberán presentar un Certificado Internacional de Vacunación contra esta enfermedad cuando las autoridades sanitarias cubanas lo soliciten. Esta medida busca prevenir la introducción y propagación de la fiebre amarilla en Cuba.
El Minsap también ha establecido directrices específicas para los viajeros, tanto cubanos residentes como no residentes y extranjeros residentes en la isla, quienes deben reportarse a su médico y enfermera de familia o a la Vicedirección de Epidemiología del área de salud correspondiente dentro de las primeras 24 horas de su llegada a Cuba.
Adicionalmente, se recomienda a todos los viajeros que permanezcan atentos a cualquier síntoma de enfermedad transmisible durante al menos 90 días después de su regreso a Cuba. En caso de presentar algún signo o síntoma de enfermedad, deben acudir inmediatamente a su médico de familia o a una institución sanitaria, enfatizando su condición de viajero internacional.
En su último informe, el Minsap indicó que, del 23 al 31 de diciembre de 2023, solo ocho personas estaban hospitalizadas en Cuba por COVID-19, sin reportes de fallecidos o pacientes en estado grave o crítico. Estos datos reflejan una situación controlada de la pandemia en la isla, lo que ha permitido la relajación de algunas medidas restrictivas para los viajeros internacionales.
