El Gobierno cubano ha revelado su plan para vender combustibles en Moneda Libremente Convertible (MLC). Esta decisión, anticipada durante el Período Ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), representa un esfuerzo por parte del Estado para adaptarse a las realidades económicas actuales y buscar nuevas fuentes de ingresos en divisas.
El Ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, comunicó en una reunión del Consejo de Ministros que se procederá a actualizar los precios tanto minoristas como mayoristas de los combustibles. Para ello, se establecerá una red de servicentros dedicados a la captación de divisas frescas. Gil Fernández enfatizó que el objetivo principal de esta medida es minimizar cualquier impacto negativo en la población cubana.
Aunque no se especificó el número exacto de servicentros que se abrirán para este propósito, la iniciativa forma parte de una serie de medidas económicas anunciadas recientemente por las autoridades cubanas. Estos cambios buscan responder a las necesidades financieras del país en un contexto global desafiante.
Gil Fernández advirtió que el incremento en los precios del combustible podría desencadenar subidas en otros servicios y productos. Explicó que los particulares y productores agropecuarios, al enfrentar costos más elevados de combustible, podrían verse obligados a aumentar los precios del transporte y los alimentos, respectivamente. A pesar de estos posibles efectos secundarios, el ministro subrayó que hay un consenso general sobre la necesidad de esta medida.
En una Mesa Redonda realizada el 27 de diciembre, Gil Fernández reiteró que Cuba no puede continuar vendiendo combustible a precios subsidiados. Esta declaración se produce en medio de un creciente descontento popular debido al aumento sostenido de los precios en los últimos meses. El ministro señaló que los precios del combustible en Cuba son extremadamente bajos en comparación con los estándares internacionales y los precios que pagan los turistas.
La decisión de vender combustible en MLC es un reflejo de los esfuerzos del gobierno cubano por encontrar soluciones viables a los desafíos económicos que enfrenta. Esta medida, aunque necesaria desde la perspectiva del gobierno, plantea interrogantes y preocupaciones entre la población sobre cómo afectará a su vida diaria y a la economía en general.
El anuncio de la venta de combustibles en MLC es un paso más en el camino de Cuba hacia una economía más diversificada y menos dependiente de los subsidios estatales. Sin embargo, también es un recordatorio de los desafíos económicos que el país sigue enfrentando y de la necesidad de encontrar un equilibrio entre la generación de ingresos y la protección del bienestar de sus ciudadanos.
