Decoración de una casa en la barriada habanera de Diez de Octubre devuelve el espíritu navideño a sus vecinos

Redacción

En La Habana, una vivienda de tres plantas en Luyanó, municipio de Diez de Octubre, ha capturado la atención y admiración de muchos en las redes sociales gracias a su espectacular decoración navideña. La casa, situada en Calzada de la Concha frente a los elevados, se ha convertido en un punto de referencia para la alegría y el espíritu festivo en la ciudad.

La decoración, que incluye una gran cantidad de inflables con motivos navideños, ha sido destacada por varios internautas en el grupo de Facebook “Madres cubanas por un mundo mejor”. Una de las madres del grupo señaló que esta tradición de decorar la casa comenzó desde el inicio de la pandemia de COVID-19, convirtiéndose en un símbolo de esperanza y alegría, especialmente para los niños que no tienen acceso a adornos navideños.

La publicación en Facebook ha generado numerosos comentarios positivos, con personas expresando su aprecio por la iniciativa y el toque de felicidad que aporta a la comunidad. “Muy lindo, le dará mucha vida a esa esquina que hoy en día hace mucha falta ya que toda Cuba está triste y apagada”, comentó una internauta, reflejando el sentimiento de muchos cubanos que encuentran en estas decoraciones un respiro de la realidad cotidiana.

Otra madre agregó: “Si, yo paso siempre por ahí y ya es tradición muy lindo todo. ¡Qué no pierdan esa ilusión!”, destacando cómo esta decoración se ha convertido en una tradición anual esperada por muchos. Además, otros usuarios mencionaron otras casas en la ciudad, como una en Santos Suárez, que también se adornan con arreglos navideños y muñecos inflables para el deleite de la comunidad.

A pesar de que en Cuba las actividades navideñas no se celebran de manera oficial y el gobierno no proporciona los materiales necesarios para estos adornos, los ciudadanos han adoptado esta tradición extranjera, incorporándola a su cultura y celebraciones. Estos esfuerzos individuales y comunitarios para mantener viva la alegría de la Navidad son un testimonio de la resiliencia y el espíritu festivo del pueblo cubano.