La semana pasada, La Habana fue sacudida por la repentina muerte de José Villavicencio Vaillan, un querido y respetado chofer cubano. La noticia se difundió rápidamente a través de las redes sociales, donde la comunidad expresó su conmoción y compartió mensajes de condolencias para consolar a la familia en duelo.
En un emotivo adiós, Indiana Flaniguin, una residente cubana, lamentó la partida de Villavicencio Vaillan, destacando su sentido de pertenencia y su profundo amor por su trabajo como chófer del ómnibus 5319 de la ruta A52. Flaniguin expresó: «Con profundo dolor despedimos hoy a José Villavicencio Vaillan, chófer del ómnibus 5319 de la ruta A52, quien por su sentido de pertenencia y gran amor por su trabajo supo ganarse el cariño y la admiración de todos sus compañeros».
La noticia de su fallecimiento mientras conducía el ómnibus dejó a muchos consternados, y aunque Flaniguin no ofreció detalles sobre la tragedia, se pudo conocer a través de los comentarios en la publicación que el conductor sufrió un infarto mientras estaba al volante.
En medio de la tristeza, otros usuarios compartieron sus recuerdos y experiencias personales con el querido conductor. Algunos recordaron cómo Villavicencio Vaillan les brindó apoyo y amistad, incluso fuera de sus responsabilidades como chofer. «Ñooo que clase de pérdida, mis más consentidas condolencias a esa familia. Muy muy buen hombre. Cuando yo iba al servicio militar él me llamaba antes de llegar a la parada y todo. Elp amigo espero allá arriba estés bien. EPD, me ayudó mucho con mi niño», expresó uno de los usuarios, resaltando la conexión especial que tenía con la comunidad.
Otras personas compartieron anécdotas sobre la bondad y generosidad de Villavicencio Vaillan, recordándolo como un hombre excepcional. «Lo conocí bien y era tremendo hombre. Que dolor, mis condolencias para sus familiares en especial a su esposa»; «EPD… Triste noticia…Mis condolencias a familia y amigos», lamentaron otros, subrayando la huella perdurable que dejó en la vida de quienes lo conocieron.
La partida de José Villavicencio Vaillan deja un vacío significativo en La Habana, y su legado perdurará en la memoria de aquellos que tuvieron el privilegio de conocer y compartir momentos con este querido chofer cubano.