En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad de La Habana, el anciano cubano Fernando Delgado, quien fue reportado como desaparecido el pasado sábado, fue encontrado sin vida el domingo.
El drama comenzó cuando Lourdes Delgado compartió una foto junto a su padre, describiendo la vestimenta que llevaba al salir de su hogar y pidiendo ayuda en las redes sociales: «Tiene un pantalón y una camisa azul, no ha regresado. Por favor, ayúdenme. Si lo ven, mi número es 52539894», escribió en su perfil de Facebook.
La incertidumbre creció cuando Lourdes reveló que su padre se dirigía hacia la zona de Río Cristal, en el municipio Boyeros, y aclaró que «está enfermo». Sin embargo, la angustia de la familia Delgado alcanzó su punto más álgido cuando, en las primeras horas del domingo, Lourdes informó en la misma publicación que su padre había sido hallado muerto, sin proporcionar detalles sobre las circunstancias del trágico suceso.
El impacto de la noticia resonó en la comunidad, y numerosas personas expresaron sus condolencias ante el inesperado desenlace del anciano. Este evento doloroso pone de manifiesto la creciente tendencia de los cubanos de recurrir a las redes sociales en situaciones de desaparición de familiares, reflejando la preocupante realidad de un aumento de la violencia en el país.
Este domingo, otro caso de desaparición se hizo eco en las redes sociales. Diannes Ochoa denunció la desaparición de Julio César Tamayo Salas en Santiago de Cuba, compartiendo la historia en el grupo de Facebook «Compra y venta El Caney». Aunque sin proporcionar detalles, Ochoa expresó la desesperación de la familia y proporcionó números de contacto para cualquier información relevante: «Su familia está desesperada buscando a esta persona, cualquier información llamar a este número: 56055325 o 58099759».
La trágica historia de Fernando Delgado subraya la importancia de la solidaridad y la colaboración en la sociedad cubana, donde las redes sociales se convierten en herramientas vitales en la búsqueda de seres queridos.