En un reciente incidente de robo en el Aeropuerto José Martí de La Habana, un cubano que viajaba desde Miami a Cuba se convirtió en víctima de la corrupción entre los trabajadores del aeropuerto. El suceso tuvo lugar el 25 de octubre, cuando el viajero, que llegó en un vuelo de la aerolínea Delta a las 3:45 pm, descubrió que una de sus dos maletas de 49 libras había desaparecido.
La nuera del afectado, en comunicación con el periodista Alberto Arego, relató la frustrante experiencia. Tras darse cuenta de la falta de una maleta, realizaron la reclamación correspondiente en las oficinas del aeropuerto, donde les prometieron una respuesta en 24 horas. Sin embargo, al regresar al día siguiente, se encontraron con la sorpresa de que la responsabilidad recaía en la aerolínea Delta, según les informó Emmanuel, el supervisor general del aeropuerto.
La familia, indignada, cuestionó la eficacia de los controles de seguridad y la integridad del personal del aeropuerto. La nuera del viajero expresó su descontento y frustración, señalando la falta de consideración hacia el esfuerzo y trabajo de los familiares que envían bienes a Cuba. «¿Dónde queda la seguridad de los pasajeros? Todo es un complot», lamentó.
En un video enviado al periodista, se muestra parte del diálogo entre la familia y el empleado del aeropuerto, quien insistía en que debían dirigirse a Delta para resolver el problema. La situación se complicó aún más cuando se reveló que alguien había sido sobornado con 130 dólares para sacar uno de los maletines, mientras que el otro fue robado.