En medio de una tragedia que ha conmocionado a la comunidad de Trinidad, Sancti Spíritus, se ha identificado a Eusbio Manzano como el presunto autor del asesinato de Lisday Castañeda, una joven maestra de escuela primaria y madre de dos pequeñas.
El periodista Niover Licea informa que Manzano mantenía una relación sentimental con la víctima, añadiendo un escalofriante matiz a este trágico suceso.
Aunque los detalles precisos del incidente aún no han sido revelados, se especula que los celos pudieron haber sido el móvil que impulsó al presunto asesino a cometer este acto atroz.
Lisday Castañeda perdió la vida tras recibir cinco puñaladas, dejando a su comunidad sumida en el dolor. La joven, víctima de violencia de género, era apreciada en su entorno, generando un profundo impacto en sus vecinos y conocidos. La noticia ha desatado una ferviente demanda de justicia por parte de la familia y la comunidad.
La incertidumbre persiste en torno a la situación del sospechoso, sin confirmarse si permanece prófugo de la justicia o bajo custodia de las autoridades comunistas en Cuba.
Este trágico suceso destaca la preocupante realidad de la violencia de género en la isla, un problema en aumento que el régimen comunista tiende a minimizar. La falta de leyes de protección para las mujeres y la opacidad en torno a estos casos han generado un clima de inseguridad y desconfianza.
Según el Observatorio de Género de Alas Tensas, se han registrado 85 feminicidios en Cuba durante 2023, una cifra que, dada la falta de informes oficiales, podría ser inferior a la realidad.
Organizaciones independientes han elevado su voz exigiendo transparencia y la declaración de un estado de emergencia para hacer frente a esta creciente problemática. La violencia de género en Cuba exige medidas urgentes y la atención del mundo ante una situación que no puede ser ignorada.