En un giro desconcertante de acontecimientos, un cubano con I-220A se enfrenta a una angustiosa realidad: tras viajar a la isla por razones personales, ahora se encuentra en una situación desesperada al descubrir que no puede retornar a Estados Unidos debido a complicaciones legales. La historia de Elcides Albezu Lores ha desatado un debate en las redes sociales, donde un audio compartido por él mismo revela los detalles de su situación.
Elcides Albezu Lores relata cómo, movido por asuntos personales, decidió viajar a Cuba sin haber completado los trámites de regularización en Estados Unidos. En un audio compartido en redes sociales, expone su desesperación al enfrentar la imposibilidad de regresar a su lugar de residencia. Según él, fue engañado en el momento de la compra de sus boletos, ya que, alega, no sabe inglés y no entendió que su pasaje solo era de ida.
La confusión se apodera de la situación cuando Albezu Lores asegura haber solicitado un boleto de ida y vuelta en el aeropuerto de North Carolina, pagando alrededor de “800 dólares” por el mismo. Sin embargo, al intentar regresar, se enfrenta a la desagradable sorpresa de que su pasaje solo cubría el trayecto de ida. Esta situación, aparentemente conocida por la mayoría de los cubanos, plantea interrogantes sobre la investigación previa del viajero en cuanto a sus condiciones legales para abandonar Estados Unidos.
Elcides Albezu Lores comparte en sus declaraciones que su viaje a Cuba fue motivado por una situación familiar crítica, donde su hijo enfrenta problemas graves. Según sus palabras, se vio obligado a tomar un vuelo hacia la isla después de que su hijo intentara lanzarse por la ventana de su casa. El relato se torna aún más desgarrador cuando expone que se siente engañado, ya que le aseguraron que podría regresar sin problemas. No obstante, al llegar al aeropuerto José Martí en Cuba, descubre que ninguno de sus boletos es adecuado para salir del país.
La narrativa culmina con la lamentación de Elcides Albezu Lores, quien expresa su desamparo al quedar atrapado en Cuba: “Ahora estoy clavado aquí y no puedo salir de aquí”.