Dos nuevas tiendas han surgido en Cuba, marcando una colaboración entre el Gobierno cubano y China. Estas, GD-Mart y Dofimall, han abierto sus puertas, operando exclusivamente con pagos en divisas, lo que representa un cambio significativo en la oferta de productos en la isla caribeña.
GD-Mart: Innovación y Variedad en la Puerta de tu Hogar
GD-Mart, gestionada por Tiendas Caribe en asociación con la empresa china Guangdong Stationery & Sporting Goods Corp, ha establecido su punto de entrega en la calle Infanta de Centro Habana. Esta plataforma en línea se especializa en electrodomésticos, prometiendo un extenso inventario para acelerar las entregas. La singularidad de GD-Mart radica en su aceptación exclusiva de pagos desde el exterior, con la ambición de ofrecer precios competitivos frente al mercado nacional. Grandes marcas como LG y Samsung buscan incorporar sus productos a esta novedosa plataforma.
No solo limitada a Centro Habana, GD-Mart ha extendido su alcance con un punto de recogida en la zona de Berroa, en proximidad a Diplomarket, otro establecimiento vinculado al régimen cubano. Su catálogo abarca desde lavadoras y aires acondicionados hasta vehículos eléctricos y televisores, con opciones más asequibles como mandos y decodificadores para televisión.
Dofimall: Tejiendo Lazos Comerciales entre China y Cuba
Dofimall, por otro lado, es una innovadora iniciativa de comercio electrónico chino-cubano que busca erigirse como la cadena virtual de suministros más grande entre ambos países. Presentada en La Habana por Dai Xiaodan, Dofimall adopta una estructura B2B, formando parte integral del proyecto Parque Industrial para China y Latinoamérica (PICLA). Su oferta abarca una diversidad de productos industriales y agrícolas, así como vehículos y otros artículos manufacturados en China. Sorprendentemente, Dofimall tiene planes de exhibir también mercancías cubanas, que incluirán tecnología y producciones artísticas.
Este fenómeno comercial emerge en un contexto donde las tiendas que operan con pesos cubanos enfrentan una escasez crítica de productos básicos, ilustrando las adversidades de la economía socialista en la isla. Las nuevas tiendas en dólares representan un cambio radical en el paisaje comercial cubano, brindando opciones más diversas para los consumidores, aunque restringidas a aquellos con acceso a divisas.
A medida que estas tiendas en dólares toman el centro del escenario, se plantea la pregunta sobre cómo esta transformación impactará la economía socialista arraigada en la isla. La escasez de productos básicos en las tiendas locales sugiere la necesidad de una revisión profunda del modelo económico actual.