En medio de la severa crisis alimentaria en Cuba, la creatividad culinaria florece con una nueva receta: «Preparado de palmiche a fuego lento». Publicada en el grupo de Facebook «Recetas desde el corazón», la receta revela la lucha de los cubanos por encontrar opciones nutritivas en tiempos difíciles.
Las imágenes, compartidas por una mujer cubana, muestran un platillo elaborado no con el fruto de la palma real, sino con la parte interior de la penca, conocida como palmito en Latinoamérica. Aunque en otros países el palmito es popular, en Cuba, según una usuaria del grupo, no es común porque implica derribar la palma real para obtenerlo.
La periodista cubana Mónica Baró señala que esta receta no es motivo de risa o ternura, sino una expresión de empobrecimiento extremo y necesidades urgentes. La situación, según Baró, no es poética ni alternativa; es una elección entre palmito y hambre, entre opciones limitadas y necesidad.
Baró destaca que la pobreza es un mecanismo de control utilizado por regímenes autoritarios, y en Cuba, lamentablemente, la población avanza hacia la pobreza. «Ningún dirigente cubano sabe lo que es el hambre», enfatiza.
A pesar de la necesidad de encontrar alternativas, la publicación de la receta aparentemente fue eliminada poco después. Este caso se suma a otras recetas inusuales compartidas por cubanos, como «congrís» con agua de hojas de guayaba ante la escasez de frijoles y pudines de arroz o boniato cuando el arroz escasea.
