El pudín de arroz se ha convertido en una tendencia culinaria en Cuba, destacándose en las páginas de recetas como una solución creativa ante la escasez de pan que afecta a muchas familias en la isla.
Un usuario de Facebook, Michel Bauta Siret, compartió su versión del pudín en el grupo «Recetas de la Comida Cubana y del Mundo..Cubanía», invitando a sus seguidores a adivinar los ingredientes de su creación. De manera similar, en el grupo «Recetas desde el Corazón», varias mujeres de La Habana han publicado sus propias variantes del pudín, buscando alternativas al pan para las meriendas de sus hijos.
Debido a la falta de pan, la receta original del pudín, que normalmente incluye pan, leche y huevos, ha tenido que ser adaptada.
Además, se ha popularizado una versión alternativa del pudín para cuando no hay arroz disponible, conocida como «pudín de plátano burro o fongos».
Algunos internautas describen estas recetas como «matahambre», refiriéndose a ellas básicamente como arroz en almíbar. A pesar de las circunstancias, muchos han elogiado la presentación y el sabor del pudín.
La crisis general en Cuba ha llevado a la aparición de recetas insólitas y cuestionables, que han generado debate y polémica en las redes sociales en las últimas semanas.
Una receta que llamó la atención fue la variante de congrís sin frijoles, publicada por una cubana en el grupo «Recetas desde el Corazón». Esta se suma a otras iniciativas como los chicharrones hechos con cáscara de yuca, potaje de cuescos de mamoncillo, ropa vieja con cáscara de plátano y café de platanillo. La propuesta de esta mujer era cocinar el arroz en agua de hojas de guayaba.
Recientemente, recetas como la ropa vieja con cáscara de plátano y las fritas de cáscara de yuca han provocado indignación entre los habitantes de la isla, quienes las consideran humillantes.
