En la mañana de este sábado, un trágico hallazgo conmocionó a la ciudad de Pinar del Río: un bebé recién nacido fue encontrado sin vida en un contenedor de basura en la calle Retiro, en el centro de la ciudad.
La activista Diasniurka Salcedo Verdecia informó que el infante fue hallado envuelto en una bolsa de nylon. El perfil de Facebook “El guardián del Aliento” precisó que el pequeño estaba en un tanque de basura situado en la intersección de las calles Rosario y Retiro. Un hombre que rebuscaba en la basura lo descubrió en la mañana del 2 de diciembre.
Este perfil de Facebook instó a las mujeres cubanas que no deseen criar a sus hijos a entregarlos a las autoridades estatales encargadas de la adopción, destacando que hay parejas que desean adoptar. Recordó un incidente similar ocurrido recientemente en Guanabacoa.
Se informó que el cuerpo del bebé fue trasladado a La Habana para investigar y determinar la identidad de la madre.
El aumento de embarazos no deseados en Cuba se atribuye a la escasez de anticonceptivos y a las dificultades crecientes para acceder al aborto debido a la falta de recursos, todo ello en un contexto de crisis económica y de valores.
Paralelamente, se ha observado un incremento en los casos de recién nacidos abandonados en basureros en la isla, la mayoría de los cuales han sido encontrados sin vida.
El 4 de noviembre, otro bebé recién nacido fue descubierto muerto en un contenedor de basura en La Habana Vieja. En marzo de este año, un caso similar sacudió a la comunidad cuando un guardia encontró a un bebé recién nacido en las instalaciones de la Escuela de Iniciación Deportiva (EIDE) Provincial Héctor Ruiz Pérez, en Santa Clara. La madre, una estudiante de la institución, había dado a luz en secreto y arrojado al bebé desde un segundo piso, causándole fracturas craneales.
A finales de 2022, en un corto período, se reportaron los hallazgos de los cuerpos de dos bebés, uno en La Habana y otro en Las Tunas.