Un emotivo reencuentro tuvo lugar esta semana en La Habana, donde un grupo de destacados actores cubanos se juntó para compartir momentos de alegría y nostalgia. La página de Facebook “Cubaactores” compartió una imagen de este encuentro, mostrando a las actrices Giselle González y Yuny Bolaños, y a los actores Carlos Luis Rodríguez y Alejandro Socorro, quien parece haber sido el organizador de la reunión.
Giselle González, en su cuenta de Instagram, reflejó la calidez del encuentro con una publicación: “Hoy fue una tarde bellísima, llena de amigos, de historias, risas, anécdotas. ¡Que se repita una y mil veces! @alejandro.socorro nos unió, la @cervezakiss nos refrescó y el @havana_level nos acogió”, expresó.
Alejandro Socorro, quien ahora reside en Estados Unidos y se ha reinventado como camionero, compartió sus sentimientos encontrados sobre Cuba. Recordó su última visita a la isla, describiendo una atmósfera de desolación y falta de dirección entre la gente. “Miro a Cuba y me provoca mucha tristeza la gente, mi familia, mis amigos… No sé qué futuro pueden tener esas personas, qué planes. Cuba me produce mucha tristeza. Viajaré para decirles a todos y a mi Isla: ‘hasta luego’. Ese país no es lo que yo dejé. Cuba ha tocado fondo”, dijo con emoción.
Socorro también habló sobre su experiencia como inmigrante en Estados Unidos, destacando las dificultades y los cambios culturales que enfrentó. Comentó sobre su trayectoria laboral diversa, desde limpiar pisos en la Corte hasta ser mesero y conductor de Uber, enfatizando que, aunque ha sido duro, no se siente frustrado ya que fue su decisión emigrar. “Lo que sí he sentido es nostalgia, y un poco de arrepentimiento por no haber venido antes. Ojalá hubiese llegado con 23 para estudiar acá. Así hubiese tenido más oportunidades”, reflexionó.
Finalmente, expresó su orgullo por haber tomado la decisión de emigrar y su gratitud por las nuevas oportunidades y responsabilidades que ha encontrado en su nueva vida, incluyendo la paternidad. “También te digo que me siento orgulloso de haber tomado ese avión, de haber cruzado esa frontera y hoy tener la dicha de estar hablando con ustedes acá, en Miami. Además, llegué con 33 años, conocí a la mamá del niño y como al año y tanto, nace él. Con un hijo se suman nuevas responsabilidades”, concluyó.
