¡Buenas noticias! Ley de la Memoria Democrática que beneficia a cubanos descendientes de españoles podría estar vigente por más tiempo del esperado

Redacción

La Ley 20/2022, conocida como la Ley de la Memoria Democrática, ha sido una legislación clave para muchos cubanos que buscan la inmigración como solución a los problemas en la isla. Según el Periódico Cubano, esta ley podría experimentar una extensión significativa en su aplicación.

Esta posible extensión se vincula con la reelección de Pedro Sánchez, líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), en España. A pesar de haber quedado en segundo lugar en las recientes elecciones, Sánchez dirigirá el gobierno español por los próximos cuatro años.

El Consejo de Ministros de España considera extender la vigencia de la ley hasta el 21 de octubre de 2025. Esto proporcionaría más tiempo para que los interesados, especialmente aquellos en Cuba, tramiten la nacionalidad española de origen. La ley es especialmente relevante para los cubanos debido a los largos procesos de legalización de documentos en entidades como el Ministerio de Asuntos Exteriores (MINREX).

La Ley de Memoria Democrática, que sustituye a la Ley de Memoria Histórica de 2007, fue una propuesta del gobierno de coalición ‘PSOE-Unidas Podemos’ bajo la presidencia de Pedro Sánchez. Fue aprobada por el Congreso de los Diputados el 14 de julio de 2023 y por el Senado el 5 de octubre del mismo año.

El artículo 1 de la ley establece su objetivo de “recuperar, salvaguardar y difundir la memoria democrática”, entendida como el conocimiento y defensa de los valores democráticos y derechos fundamentales en la historia contemporánea de España. Busca fomentar la cohesión y solidaridad entre generaciones en torno a los principios y valores constitucionales.

Además, la ley busca reconocer y reparar moralmente a quienes sufrieron persecución o violencia por razones políticas, ideológicas, de pensamiento, opinión, conciencia, creencia religiosa, orientación o identidad sexual durante la Guerra Civil Española y la Dictadura franquista, hasta la promulgación de la Constitución Española de 1978. La ley también promueve la eliminación de elementos divisivos entre la ciudadanía y fomenta la unión en torno a los valores, principios y derechos constitucionales.