En una jornada impactante, el doctor exiliado Alexander Jesús Figueredo Izaguirre revela la identidad de los cirujanos cubanos enjuiciados a puerta cerrada en Bayamo. La denuncia, compartida en redes sociales, destapa un escenario oscuro en el sistema de salud cubano.
Los profesionales de la salud bajo escrutinio son el Dr. Rafael José Sánchez Vázquez, la Dra. Yoandra Quesada Labrada, el Dr. Ristian Solano, la Dra. Elizabeth Silvera, el Dr. Williams, y el Dr. Henrry Rosales Pompa. Figueredo Izaguirre lanza un llamado urgente a la comunidad médica del Hospital Carlos Manuel de Céspedes para que defiendan a sus colegas.
En medio de un juicio que el exiliado describe como arbitrario, los cirujanos enfrentan acusaciones relacionadas con la atención a un paciente accidentado en una moto. Figueredo Izaguirre denuncia la falta de insumos básicos en el salón de operaciones, como levine, sutura y un tomógrafo en mal estado, detallando condiciones que, según él, son conocidas por todos los médicos cirujanos.
«Es vergonzoso», declara Figueredo Izaguirre, señalando la falta de acción por parte de la dirección de salud en Bayamo. Afirma que la comisión de Manzanillo propone dos años de privación de libertad para cada cirujano enjuiciado. El exiliado destaca la necesidad de una respuesta colectiva de la comunidad médica, llamando a una «Huelga General del servicio de cirugía» y recordando a sus colegas la importancia de hacerse respetar.
Figueredo Izaguirre finaliza su denuncia con un poderoso llamado a la acción: «Háganse respetar, o véanse en ese mismo espejo». Subraya que el juicio arbitrario contra los cirujanos podría ser un presagio para cualquier médico en el futuro.
Este escándalo médico revela fisuras en el sistema de salud cubano y plantea preguntas cruciales sobre la transparencia y la justicia en el país. La entrada profundiza en las circunstancias del juicio secreto, la identidad de los cirujanos afectados y el llamado a la solidaridad dentro de la comunidad médica.
