La prensa estatal cubana ha calificado la valoración del dólar en el mercado informal como una «ficción» y atribuyéndola a una campaña de «guerra política y económica» en contra de la nación.
Un análisis realizado por la economista venezolana Pasqualina Curcio Curcio, y publicado en el periódico Granma, resalta que tanto Cuba como Venezuela han sido blanco de un asedio persistente a sus divisas nacionales, impactando más allá del terreno económico y afectando la estabilidad social y política de ambos países.
Curcio sostiene que, paralelamente a un severo bloqueo económico, la alteración en el cambio de divisas es parte de una estrategia de guerra económica orquestada desde Estados Unidos. Según la economista, esta ofensiva implica la promoción de sitios web que establecen tasas de cambio exageradas, muy por encima de las oficiales, las cuales terminan siendo referencias negativas para fijar precios de bienes y servicios locales.
«El gran dilema radica en que, aunque estos tipos de cambio sean irreales, influyen directamente en todos los precios de la economía, lo que no se refleja en un aumento proporcional y simultáneo de los salarios. Esto conduce a una notable pérdida del poder adquisitivo, una disminución en la demanda y la producción, así como a una insuficiencia presupuestaria pública, fomentando la desigualdad», agregó Curcio.
La táctica descrita por Curcio, que ella denomina «desestabilizadora», no sigue una lógica económica tradicional, y enfatiza que es una forma de agresión que se apoya en la influencia de los medios de comunicación y las redes sociales.
La prensa oficial cubana concluye que el valor del dólar en el mercado informal no es un reflejo de la situación económica real, sino el resultado de manipulaciones políticas y económicas por parte de actores externos, diseñadas para desestabilizar a gobiernos que no se alinean con la política exterior de Estados Unidos.
Sin embargo, lo que no se aborda en el análisis de Curcio es que la transacción de divisas en el mercado negro se ha vuelto una práctica habitual en Cuba, debido a las restricciones y limitaciones en la comercialización de divisas en entidades bancarias y financieras estatales, las únicas autorizadas para tales operaciones.
El valor promedio del euro, el dólar y la moneda libremente convertible (MLC) -las tres divisas principales en el mercado informal- son documentados diariamente por el medio independiente elToque. Esta tasa se establece tras analizar anuncios de compra y venta en redes sociales y sitios web de clasificados, ofreciendo un precio de referencia para las principales divisas en circulación en el país.
De acuerdo con la información más reciente, en las últimas 24 horas, el precio promedio de venta informal del euro ha sido de 268 pesos, el dólar a 260 CUP y el MLC a 240 pesos.
Los ciudadanos cubanos monitorean de cerca estas tres divisas en el mercado informal, considerándolas un recurso crucial para quienes tienen acceso a ellas, en medio de una inflación desbordada, una crisis económica implacable y una escasez crónica de alimentos.
El mercado informal se ha convertido en un pilar fundamental en la vida de los residentes de la isla, con el precio de las divisas experimentando fluctuaciones significativas. Aunque hubo una disminución a finales de agosto, desde principios de septiembre, el dólar, el euro y el MLC han mostrado una tendencia ascendente sostenida.