La empresa italiana Italsav, dirigida por el empresario Berto Savina (Bartolomeo Sabina Tito), un conocido asociado de la familia Castro con presencia en Cuba desde principios de los años 90, ha anunciado planes para transformar el histórico «ten cent» de Galiano, más recientemente conocido como Variedades Galiano, en un moderno centro comercial. Este proyecto, denominado Variedades Galiano Casalinda, está programado para abrir sus puertas a principios de 2024.
La noticia, publicada en el sitio oficial Cubadebate, sigue a la firma de un contrato de asociación económica internacional entre Tiendas Caribe e Italsav, marcando un hito en el comercio minorista cubano. Este acuerdo representa la culminación de más de un año de negociaciones y refuerza una alianza de más de 25 años entre las dos entidades.
Italsav, conocida por administrar las tiendas Todo x 1 y más recientemente los mercados de productos de aseo Burbujas y Agua y Jabón, expandirá su oferta en este nuevo emprendimiento. El centro comercial ofrecerá una variedad de productos, incluyendo alimentos, calzado, electrodomésticos y artículos de aseo, con un enfoque especial en los emigrados cubanos, quienes podrán realizar compras online para sus familiares y amigos en la isla.
El empresario Berto Savina, al firmar el acuerdo, expresó su gratitud por el apoyo de las autoridades cubanas, mientras que Ana María Ortega, directora general de Tiendas Caribe, destacó la relación respetuosa y de larga data con Italsav.
El nuevo centro comercial ocupará el emblemático edificio donde en 1924 la cadena estadounidense Woolworth estableció uno de sus populares comercios. Este desarrollo se produce en un contexto donde otras iniciativas comerciales extranjeras están emergiendo en La Habana, como la apertura de la tienda RusMarket para productos rusos y la marca de alimentos DeCancio Foods del empresario cubanoamericano Hugo Cancio.
Estos avances comerciales ocurren en un momento en que Cuba enfrenta una de sus peores crisis económicas, con una escasez crítica de alimentos, medicinas y bienes de consumo. Mientras tanto, el gobierno parece enfocarse más en la inversión en turismo y hoteles que en la revitalización de la economía y la agricultura nacionales. Este escenario plantea interrogantes sobre el equilibrio entre el desarrollo comercial y las necesidades básicas de la población cubana.
