Durante su visita a Minsk, Manuel Marrero, el primer ministro cubano, ha cerrado acuerdos cruciales con Bielorrusia para la adquisición de alimentos, fármacos y maquinaria agrícola, destacando la importancia de estas colaboraciones en la actual crisis que enfrenta Cuba.
La firma de tres documentos en el sector biotecnológico, incluyendo memorandos y un acuerdo de cooperación, refleja el compromiso de ambas naciones en fortalecer sus lazos estratégicos.
Bielorrusia propone la creación de una empresa farmacéutica de capital mixto, basada en la estatal Academpharm y beneficiándose de la experiencia de BioCubaFarma, el conglomerado cubano.
Vladimir Gusakov, presidente de la Academia Nacional de Ciencias de Bielorrusia, resalta la disposición de su país para colaborar científicamente con Cuba en diversos campos.
Manuel Marrero lideró la introducción de la vacuna cubana CIMAVAX contra el cáncer de pulmón en el mercado bielorruso, marcando un hito en la cooperación farmacéutica entre ambos países.
En total, seis productos farmacéuticos cubanos estarán disponibles en Bielorrusia, diversificando y mejorando la oferta de productos, según el ministro cubano de la Industria Alimentaria, Manuel Sobrino Martínez, quien forma parte de la delegación oficial.
La carencia de alimentos en Cuba, una preocupación aguda que amenaza la estabilidad del gobierno, impulsa la cooperación agroindustrial con Bielorrusia. Manuel Marrero busca consolidar vías para adquirir maquinaria agrícola moderna y diversificar la producción nacional de carnes y lácteos.
La visita incluyó la discusión en la fábrica de tractores MTZ sobre un proyecto de ensamblaje de maquinaria en Cuba, una medida estratégica para reforzar la producción nacional en un momento crítico.
Antes de llegar a Bielorrusia, Manuel Marrero estuvo en China, cerrando varios acuerdos de colaboración en el gigante asiático. Estos movimientos apuntan a una estrategia integral para impulsar la recuperación económica y alimentaria de Cuba.