Un trágico suceso sacudió a la comunidad de Bejucal, La Habana, cuando Brayan Califa, un joven de 18 años y entrenador de Tenis de Mesa, fue asesinado la noche del viernes. Según relatos de su prima, Jenniffer Vigil Aldama, el incidente ocurrió cuando Brayan y sus amigos se encontraron con un hombre en estado de ebriedad que comenzó a provocarlos.
A pesar de intentar evitar el conflicto, Brayan fue atacado con un cuchillo por el individuo, sufriendo una herida fatal que afectó órganos vitales. Aunque fue llevado rápidamente a un centro médico, no sobrevivió. El agresor, aún bajo los efectos del alcohol, se presentó en el mismo hospital donde fue detenido por las autoridades.
La noticia ha dejado a la familia y amigos de Brayan devastados. En una publicación en Facebook, su prima recordó los momentos compartidos y expresó su profundo dolor por la pérdida. Otros amigos y conocidos también compartieron sus sentimientos y recuerdos sobre el joven en la red social.
Este lamentable evento se suma a otros incidentes violentos recientes en Cuba, evidenciando una preocupante tendencia de aumento en la criminalidad en la isla. Otros casos, como el asesinato entre miembros de la comunidad abakuá y varios jóvenes que perdieron la vida a causa de puñaladas, reflejan la creciente inseguridad que vive el país. La sociedad cubana está en alerta y busca respuestas ante esta ola de violencia que parece no tener fin.
