Marta León, la cubana que fue dejada atrás por su hijo en la densa Selva del Darién durante su travesía migratoria, ha llegado finalmente a Brasil, reuniéndose con su hija, Yudith Rejas León.
“Estoy profundamente agradecida con todos ustedes. Mi madre ya está con nosotros. Aún hay un largo camino por recorrer para restaurar su salud”, compartió Rejas León en el grupo de Facebook Cubanos en Brasil, acompañando su mensaje con una foto junto a su madre.
Debido a las adversidades que enfrentó en la selva, Marta llegó a Brasil en silla de ruedas.
Un conmovedor video en redes sociales capturó el emotivo reencuentro entre Marta y su hija en Brasil.
“¿Recuerdan a Marta León, la mujer abandonada en la Selva por su hijo? Hoy, gracias al apoyo global, está aquí en Brasil”, comentó un usuario llamado “Albert Brasil”, adjuntando imágenes que narran la odisea de Marta desde su rescate en la selva hasta su reencuentro con su hija.
La noticia generó una ola de comentarios de compatriotas aliviados y esperanzados en que Marta pueda sanar, tanto física como emocionalmente, de esta traumática experiencia.
El esperado reencuentro se vio postergado ya que Marta necesitaba un nuevo pasaporte para viajar, un proceso que se complicó debido a la negativa de Lázaro, su hijo, a entregar el documento necesario.
En septiembre, se informó que la recuperación de Marta estaba siendo más complicada de lo anticipado, con el riesgo de perder una pierna debido a graves úlceras, según el periodista Javier Díaz de Univision.
Fotos compartidas en ese momento mostraban las severas heridas en sus piernas, resultado de los días que pasó abandonada.
La desgarradora historia de Marta, quien fue abandonada por su hijo tras sufrir una caída en la selva, conmovió a muchos en agosto. Estuvo seis días sola, con las piernas fracturadas, en una zona selvática entre Panamá y Costa Rica.
A pesar de las circunstancias, un migrante venezolano la encontró y solicitó ayuda en línea. Indígenas y coyotes finalmente la rescataron y la llevaron a un refugio para migrantes.
El viaje de Marta León es testimonio de resiliencia y esperanza, y ahora se enfoca en su recuperación y en comenzar una nueva etapa en su vida.