En medio de la crisis de combustible que afecta a Cuba, las autoridades han tomado medidas drásticas para abordar la situación. La crisis de energía, anunciada por el régimen, ha llevado a un reajuste en la transportación de pasajeros en varias provincias de la isla. En este artículo, examinaremos las implicaciones de estas medidas y cómo están afectando a la vida cotidiana de los cubanos.
Según el diario oficialista Escambray de Sancti Spíritus, en esta provincia ya se están realizando ajustes en la programación de las rutas de transporte y las frecuencias de los viajes. Yunelbys Solenzal Hernández, director de Operaciones en la Empresa Provincial de Transporte (EPT) Sancti Spíritus, explicó que se dará prioridad al horario de mayor demanda, como el pico de la mañana, con un solo ómnibus por ruta.
Las rutas 2, 7 y 5 serán las más beneficiadas, ya que conectan lugares de gran importancia, como la Universidad de Ciencias Médicas con el Hospital Provincial y la zona central de la ciudad. Sin embargo, el servicio de ómnibus Ruteros solo operará por la mañana, con dos viajes por la tarde, y no se prestará servicio durante el mediodía.
La situación es aún más complicada para los estudiantes y profesores que deben trasladarse a centros educativos provinciales, como el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas y el Politécnico de Informática. Aunque se garantizará su transporte, los viajes de cierre hacia estos destinos han sido suspendidos hasta que las condiciones lo permitan.
Además, se ha informado que se paralizarán todas las rutas y la transportación de pasajeros en los demás municipios de la provincia. Estas medidas han generado preocupación entre la población, ya que afectarán significativamente la movilidad de las personas y su acceso a los servicios esenciales.
La crisis de combustible en Cuba ha sido atribuida por el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, al embargo estadounidense y al incumplimiento de contratos con otros países. Si bien el ministro asegura que el país «no está en cero de combustible», ha anunciado apagones programados durante octubre debido a un déficit de hasta 700MW.
Una de las diferencias clave en esta crisis es que, a diferencia de situaciones anteriores, una parte sustancial de las reservas de combustible se destinará a sectores más allá de la generación energética, como el transporte y la agricultura. Esto significa que la escasez de combustible afectará múltiples aspectos de la vida cotidiana de los cubanos.