Mientras el pueblo cubano continúa enfrentando dificultades económicas y una creciente escasez de recursos básicos, los excesos y lujos de la familia de Manuel Marrero, en especial de Tamara, su hermana, generan repulsión e indignación.
El cumpleaños número 52 de Tamara Marrero no pasó desapercibido en las redes sociales, donde ostentó su estilo de vida opulento, agudizando la desigualdad en Cuba.
En un país donde la mayoría lucha por satisfacer sus necesidades básicas, las imágenes de Tamara disfrutando de extravagantes celebraciones de cumpleaños y pasteles lujosos resaltan la disparidad con la que vive la población cubana.
Uno de los eventos más controvertidos, que ha despertado críticas y fue reportado por el medio Periódico Cubano, fue la organización de la boda del propietario de uno de los restaurantes más grandes de Holguín, en la que Tamara Marrero tuvo un papel destacado.
Según el citado medio, aseguran que se reservó todo el Hotel Sierra Maestra para la boda, un lugar al que la mayoría de los cubanos apenas podría aspirar a visitar. Esta ostentosa celebración contrasta drásticamente con la realidad de los habitantes del país, quienes luchan día a día para llegar a fin de mes.
La boda de Carlos González, un cubano que divide su residencia entre Estados Unidos y Cuba, contó con flores exóticas y manjares exquisitos. Se rumorea que González es el dueño visible del restaurante The Passion, pero en Holguín se asegura que en realidad, el negocio pertenece a Manuel Marrero.
No es la primera vez que Tamara Marrero es expuesta en los medios independientes por sus excesos y su vida de lujo, que muestra al mundo con total desfachatez.
Se sabe que Tamara tiene su propio Spa dentro del hotel Río de Oro, en la provincia oriental. Además, a finales del año pasado, cuando la mayoría del pueblo no sabía qué llevar a la mesa en Navidad, Tamara participó en una actividad con puerco asado, comida y bebidas.