El destacado reguetonero cubano, Yomil, ha alzado la voz contra una preocupante tendencia que ha observado en el mundo de los influencers cubanos. En una crítica contundente a través de sus redes sociales, Yomil señaló que estos influencers se han convertido en una herramienta de la Seguridad del Estado del régimen cubano.
El cantante expresó su descontento con muchos youtubers que han centrado sus esfuerzos en criticar a los artistas, en lugar de enfocarse en la crítica y denuncia de la dictadura en Cuba.
«Durante 15 días, han estado creando controversia con programas que buscan desacreditar a artistas como Lenier y El Boris. Aquí los únicos que siguen siendo manipulados por estos individuos son los ingenuos», afirmó Yomil, haciendo referencia a la denuncia del influencer Ultrack, quien alegó haber sido agredido por los mencionados artistas en una discoteca en Miami.
Yomil también planteó una pregunta relevante: ¿Por qué los artistas cubanos son tratados con hostilidad y desprecio cuando visitan su propio país, mientras que el régimen no toma medidas similares contra el presidente Díaz-Canel cuando visita el extranjero? Para Yomil, esto se traduce en oportunismo y descaro por parte de algunos influencers.
El reguetonero también tuvo palabras para el presentador Alexander Otaola y su equipo. En su crítica, Yomil acusó a Otaola y su camarilla de siete años de realizar programas sin lograr un impacto significativo en Cuba. Más bien, los acusó de obtener beneficios financieros a costa de chivatear y perjudicar a cualquiera que se cruce en su camino.
Finalmente, Yomil destacó una preocupación grave: que estos influencers cubanos se han convertido en la mejor arma de la Seguridad del Estado para controlar y manipular la narrativa en Cuba.
En días recientes, Yomil mostró su apoyo al regreso de su colega El Micha a Cuba, enfatizando que la isla pertenece a todos los cubanos. Reconoció el esfuerzo de El Micha por salir adelante desde un barrio humilde y convertirse en una figura destacada en la música, recordándonos que la unidad y el respeto son fundamentales en tiempos de cambio y desafío.