En un relato sorprendente que ha sacudido las redes sociales, una ciudadana cubana ha decidido alzar la voz y exponer las tácticas fraudulentas empleadas por dependientes de una tienda en MLC en la capital cubana. Su valiente denuncia tiene como objetivo alertar a otras personas para que eviten caer en engaños y no sean víctimas de un desfalco de su dinero duramente ganado.
Esta internauta no solo ha señalado el lugar donde ocurrieron los hechos, sino que también ha detallado la estrategia utilizada por los empleados para retener parte de los alimentos que pertenecen legítimamente a los clientes.
Su testimonio es una llamada de atención para todos aquellos que se aventuran a realizar compras en estas tiendas en MLC, destacando la importancia de estar alerta y protegerse contra posibles abusos.
La protagonista de esta historia relata su experiencia de la siguiente manera:
«Quiero denunciar lo que está sucediendo en la tienda Boyeros y Camagüey.
Entro a la tienda y le pregunto al dependiente de los cárnicos [Moreno de piel oscura con trenzas, bajito, lo describo lo mejor posible para que lo identifiquen]: ¿qué precio tiene el kg de jamón?
Me dice: los precios están en cada pedazo
Le digo: yo no le estoy preguntando los precios del pedazo le pregunté claramente el precio del kg de jamón.
Me dice: 7 y pico [mucha precisión la de él].
Voy a buscar la tarjeta, regreso, busco en la pizarra el precio del jamón y no lo encuentro [no estaba puesto], voy a la nevera y busco un pedazo de 0.9kg y veo que vale 8.20.
Le digo: por qué no tienes puesto el jamón en la pizarra, es el único producto que no tienes
Me dice: Sí, no está.
Le digo: Sí pero que por qué no está, eso tiene que estar ahí y cómo es posible que si el kg según tú vale 7 y pico un pedazo que pesa menos de 1kg valga 8 y pico.
Se queda callado se mira con otra muchacha y se pone a buscar en una libreta, luego mete un código en la pesa, El kilogramo vale 6.85 MLC.
Me dice a modo de «disculpa» que es que se había confundido y que lo estaba cobrando como jamón no sé cuál [el cual no es]
Luego fue una señora mayor que estaba en la cola de los otros productos cerca mío y le hice el cuento a querer comprar a 6.85 el kg y le dijeron que no que el precio era el que decían los pedazos [NO CORRIGIERON NADA]
Yo quería ir a la dirección [que seguro allí lo saben] pero iba a llover, y mi mamá estaba apurada y teníamos cosas que hacer me pidió que no la demorara.
Para no seguir haciendo el cuento largo, cobran de más para luego llevarse el jamón porque en la cuenta no sale que te llevaste 1 o 2kg de jamón, sólo dice que 10 mlc o 9 o 12 y a la hora de liquidar lo que vendieron ya saben.»