Los migrantes cubanos que sean detenidos en el intento de cruzar la frontera entre Ciudad Juárez y Texas serán entregados al Instituto Nacional de Migración (INM) en México para su pronta repatriación a Cuba.
Esta medida fue acordada durante una reunión entre autoridades migratorias y de seguridad de México y Estados Unidos, convocada para abordar el aumento en el flujo de migrantes que ha llevado al cierre de dos pasos fronterizos esta semana y al cese de operaciones de 60 trenes de carga de Ferromex, la principal empresa ferroviaria mexicana.
En julio pasado, la administración del presidente Joe Biden anunció que permitiría que algunos inmigrantes provenientes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, que ya se encontraban en México, pudieran solicitar ingresar a Estados Unidos como refugiados.
En esta reunión, a la que también asistieron representantes de Ferromex y la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, se acordó tomar medidas para «despresurizar» las ciudades fronterizas del norte, como la habilitación de más albergues y el arrendamiento de un nuevo inmueble en Ciudad Juárez para reemplazar la estación migratoria que fue cerrada tras un incendio en marzo, que lamentablemente causó la muerte de 40 migrantes.
El INM informó en un comunicado que el objetivo principal es atender las necesidades a lo largo de la ruta ferroviaria y disuadir a los migrantes de arriesgar sus vidas al intentar abordar los trenes.
Además, se nombrará a un coordinador del INM encargado de supervisar que todas las acciones en la ruta ferroviaria se lleven a cabo adecuadamente y se proporcionarán estadísticas al secretario general de gobierno de Chihuahua.
