Los cubanos, acostumbrados a hacer humor sobre su situación, bromean sobre la creciente dificultad para adquirir frijoles, un alimento básico que ahora supera en precio a la carne de cerdo. Históricamente, las legumbres han sido una base fundamental en la alimentación cubana, pero su costo ha aumentado significativamente.
A través del sistema de abastecimiento normado y la libreta de racionamiento, se supone que cada persona reciba al menos 10 onzas de frijol negro al mes a un valor de 10 pesos cubanos (CUP). Sin embargo, en el año 2023, debido a retrasos en la entrega de la canasta básica y otros factores, muchas personas no han recibido estas raciones durante meses.
Para aquellos que no pueden acceder a estas raciones, la única opción es comprar legumbres en el mercado de oferta y demanda, donde el precio de una libra de frijol negro puede llegar a ser hasta 21 veces más caro, oscilando entre 320 y 350 CUP. En algunas provincias como Santiago de Cuba, el precio puede alcanzar los 700 CUP por libra de frijol negro importado.
El frijol colorado tiene un precio similar al frijol negro, pero otras legumbres como el frijol blanco, las lentejas o los garbanzos son aún más costosas. Algunas pequeñas y medianas empresas (mipymes) venden la libra de judías a precios que varían entre 420 y 400 CUP, dependiendo de la cantidad comprada. En la zona oriental del país, las lentejas pueden llegar a costar 650 CUP por libra y las alubias blancas 750 CUP.
A pesar de los esfuerzos de algunos productores privados, la mayoría de los cubanos no puede permitirse comprar legumbres y otros alimentos básicos debido a la inflación y la falta de aumento en los salarios y pensiones. El economista Pedro Monreal destaca que la respuesta de la oferta agropecuaria, incluidas las mipymes, es esencial para combatir la inflación en Cuba, pero el problema radica en el crecimiento desproporcionado de los precios de consumo en comparación con los ingresos de la población.
El sector privado agropecuario es un pilar importante en la producción de alimentos en Cuba, pero aún enfrenta desafíos significativos, como la falta de infraestructura adecuada y recursos para el almacenamiento y transporte de productos agrícolas.
