En una reciente entrevista, el proceso legal para los migrantes que cruzan irregularmente la frontera de Estados Unidos fue explicado por el respetado abogado de inmigración, Wilfredo Allen. Allen, en sus declaraciones a Univision, hizo hincapié en la importancia de conocer las opciones disponibles para aquellos que tienen la esperanza de quedarse en el país de manera legal.
En primer lugar, se mencionó la posibilidad de aplicar para asilo dentro de los Estados Unidos. Sin embargo, Allen subrayó que obtener asilo no es una tarea sencilla. En realidad, la gran mayoría de las personas que buscan asilo en el país enfrentan un proceso difícil y muchas veces resultan en una negativa. Además, dado el sistema de asilo actual, que está al borde del colapso, los solicitantes pueden esperar largos períodos de espera antes de tener su caso en una corte.
Este aumento en la inmigración irregular ha sido objeto de preocupación por parte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Según el DHS, muchos de estos cruces irregulares son facilitados por traficantes de personas, lo que plantea graves consecuencias para aquellos que ingresan sin la debida autorización.
Además, altos funcionarios del DHS informaron que desde el 12 de mayo, más de 253,000 personas han sido deportadas desde Estados Unidos, y se están implementando medidas para acelerar las remociones de grupos familiares a nivel nacional.
Mientras tanto, la administración Biden continúa buscando maneras de facilitar la inmigración legal a Estados Unidos. A pesar de estas iniciativas, la ola migratoria no muestra signos de disminuir.
En noticias recientes, el periodista de FOX, Bill Melugin, documentó el cruce irregular de miles de migrantes en caravanas por la zona de Eagle Pass, Texas. En uno de los videos compartidos por el reportero, una persona expresó su motivo para cruzar la frontera: «Por culpa de una dictadura».
Melugin también señaló que un gran grupo de hombres adultos, en su mayoría solteros, esperaban ser procesados por la Patrulla Fronteriza. Añadió que más personas seguían cruzando en ese momento, formando una línea aparentemente interminable. Parece que el miedo a las consecuencias por cruzar ilegalmente no disuade a estos migrantes.
