Los familiares de Alian Rodríguez Díaz han levantado su voz en protesta, alegando que su trágica muerte en Granma fue el resultado de una brutal golpiza, a pesar de que las autoridades determinaron que se debió a causas naturales.
«Una vez más, se ha perpetrado una grave injusticia en este país. Mi sobrino Alian Rodríguez Díaz, de tan solo 31 años, fue víctima de una brutal paliza que finalmente le arrebató la vida, y los médicos del Hospital Carlos Manuel de Céspedes certificaron su fallecimiento como natural», denunció con vehemencia Odalys Aguilar Pérez, tía de Alian.
Aguilar Pérez afirmó que el cuerpo de su sobrino mostraba claros signos de violencia, lo que ha generado dudas en la familia acerca de la versión oficial.
«Hasta cuándo van a justificar los actos delictivos, ¿a quién están tratando de proteger? No se tomaron en cuenta todas las evidencias de los terribles golpes que cubrían su cuerpo y su rostro. ¿A quién están encubriendo? La familia exige justicia, aunque ya no podamos recuperar a Alian. Mientras tanto, los responsables de su brutal agresión caminan impunes por las calles de Minas de Harlen, conocido como Charco Redondo en el municipio de Jiguaní, Granma», agregó con indignación.
Inicialmente, un tío del joven había declarado que Alian había fallecido debido a un paro respiratorio. No se han divulgado más detalles sobre este incidente.
Este presunto asesinato se suma a una serie de actos violentos sin precedentes en Cuba. Solo en lo que va del mes, se han registrado al menos otros seis homicidios en el país, que se han difundido ampliamente a través de las redes sociales.
En el municipio de Aguada de Pasajeros, Magnolia Quevedo fue víctima de un brutal asesinato en su propia vivienda, donde fue degollada. Una vecina informó que el móvil del crimen fue un robo, ya que la mujer solía vender recargas telefónicas y café.
La ciudad de Santa Clara se conmovió por el homicidio de Eliecer O’Connor, un exjugador de béisbol cubano que participó en cinco Series Nacionales con los equipos de Villa Clara y Cienfuegos, con un promedio ofensivo de 192. O’Connor recibió tres puñaladas mortales, lo que dejó a la comunidad consternada.
