“Pinchando como un caballo”: Ancianos cubanos en Miami desafían el trabajo sin miedo

Redacción

En la vibrante ciudad de Miami, dos cubanos de avanzada edad han dejado una huella imborrable al demostrar su dedicación y actitud positiva hacia el trabajo. Estos individuos, uno de ellos recién llegado a los Estados Unidos, compartieron sus inspiradoras experiencias laborales, desafiando los estereotipos y las actitudes negativas que a veces se asocian con el empleo.

El primero de nuestros protagonistas es un caballero de 80 años que se gana la vida trabajando en el mantenimiento de piscinas. Cuando se le preguntó sobre su experiencia laboral en Estados Unidos, respondió humildemente: «Pinchando, trabajando como un caballo». Esta afirmación sencilla pero poderosa refleja su ética de trabajo incansable.

El entrevistador, Dairon Cano, compartió que su padre, un residente de La Habana de 49 años, también tenía el deseo de emigrar a los Estados Unidos. Los cubanos entrevistados consideraron que la edad nunca debe ser un obstáculo para buscar oportunidades en un nuevo país. El recién llegado de 60 años compartió su experiencia personal alentadora: «Dile que yo vine hace nueve meses y tengo 60. Dile que aquí, cuando se levante por la mañana y se coma una tortilla de jamón y queso y se tome un vaso de leche con cereales, lo que sale para la calle es un león. Que venga para acá y que no tenga miedo».

Estas palabras inspiradoras transmiten la mentalidad valiente y positiva que estos cubanos de avanzada edad han adoptado al buscar oportunidades en Estados Unidos. Su historia se destaca aún más en contraste con un reciente video viral que mostró a un joven repartidor de Amazon de origen cubano que se negó a subir un paquete de 40 libras a un tercer piso, citando el calor y el peso como excusas.

El video, compartido en TikTok, generó un debate sobre la ética laboral y las actitudes hacia el trabajo. Los comentarios de los usuarios reflejaron una variedad de opiniones, algunos recordaron al joven repartidor que su trabajo era cumplir con las entregas, mientras que otros expresaron comprensión por las difíciles condiciones de trabajo.

Sin embargo, la historia tomó un giro positivo cuando un empleado de FedEx en Estados Unidos, también de origen cubano, decidió dar una lección de ética laboral al joven repartidor de Amazon. Demostró cómo subir a hombros dos cajas de aproximadamente 35 libras cada una y llevarlas a un tercer piso a través de las escaleras.

El mensaje fue claro y directo: «Cuando el cliente paga un servicio, el servicio debe ser completado por el conductor o por quien sea. No puedes tener miedo al trabajo. Así es como se trabaja en Estados Unidos, amigo, cuando el cliente paga, debes hacer el servicio como se espera».

Esta lección de perseverancia y ética laboral es un recordatorio de que el trabajo duro y la dedicación son valores fundamentales que trascienden la edad y el origen cultural. Los cubanos de avanzada edad en Miami nos demuestran que, independientemente de las circunstancias, uno puede abrazar el trabajo con pasión y determinación.

En un mundo donde a menudo se debaten cuestiones relacionadas con el trabajo y las actitudes laborales, estas historias sirven como inspiración para todos nosotros. Los cubanos de Miami nos recuerdan que el trabajo es una oportunidad para crecer, aprender y contribuir a la sociedad, y que nunca es demasiado tarde para buscar nuevas metas y desafíos laborales.