En medio de la conmoción que sacude a la sociedad cubana, una conmovedora historia de supervivencia sale a la luz. Una humilde abuela cubana se embarca en una búsqueda desesperada en los contenedores de basura de La Habana, en un esfuerzo por encontrar ropa para ayudar a una amiga que ha perdido todo.
Este desgarrador episodio fue capturado por el opositor y ex preso político Silverio Portal, quien no pudo evitar sentir empatía al ver a la anciana rebuscar en la basura en busca de prendas de vestir, entre las que se encontraba un antiguo pantalón corto.
A pesar de su situación precaria, la abuela ha encontrado una manera de evitar el contacto directo con la ropa recolectada al utilizar un palo para manipularla.
Cuando se le preguntó sobre su motivación, explicó que lo que recoge es para una amiga en el campo que ha perdido todas sus pertenencias debido a las difíciles condiciones en las que vive. La abuela se dedica a hervir la ropa con cloro para asegurarse de que esté limpia y libre de contaminantes antes de entregársela a su amiga necesitada.
Sin embargo, su historia revela un aspecto desgarrador de la vida en Cuba. La abuela se vio obligada a buscar ropa en la basura después de que le informaran en el banco que no podría cobrar su jubilación hasta el día 25 del mes. Su pregunta retórica, «¿Y entonces cómo como?», resalta la lucha de los cubanos mayores para sobrevivir en medio de la crisis económica y las limitaciones impuestas por el sistema.
A pesar de tener una hija, un nieto en el extranjero y otro hijo, la abuela insiste en no pedirles ayuda, ya que no desea ser una carga para su familia. Su determinación por mantener su dignidad y no molestar a sus seres queridos es conmovedora.
Esta no es una historia aislada. En toda Cuba, cada vez más personas vulnerables, incluidos ancianos, recurren a la búsqueda de alimentos y artículos en la basura como una forma desesperada de sobrevivir en medio de la crisis económica que afecta al país. La desnutrición y la falta de acceso a alimentos básicos se han convertido en una realidad preocupante.
Hace poco menos de un mes, se registró un incidente en Santiago de Cuba en el que un anciano fue filmado buscando comida en la basura mientras repetía que tenía hambre. El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció esta triste situación y destacó que el 72% de los cubanos viven muy por debajo del umbral de la pobreza.
La organización ha documentado otros casos similares que reflejan el deterioro de la calidad de vida en Cuba debido a su sistema político en crisis. Un vertedero rodeado de ganado flaco en Holguín se ha convertido en un destino para personas pobres y desfavorecidas que buscan cualquier cosa, incluso comida, para vender y subsistir.
En otro caso conmovedor, se reveló la historia de un hombre con problemas mentales en el parque Heredia de Santiago de Cuba, quien revisa los basureros en busca de alimentos debido a la falta de tratamiento médico adecuado.
Estas historias subrayan la urgente necesidad de atención y apoyo a las poblaciones vulnerables en Cuba. Mientras el país enfrenta desafíos económicos y sociales, es imperativo que se tomen medidas para abordar las dificultades que enfrentan las personas mayores y otros grupos marginados. La historia de la abuela cubana nos recuerda la importancia de la solidaridad y la empatía en tiempos de crisis.
