Las provincias cubanas de Pinar del Río y Artemisa, junto con el municipio especial Isla de la Juventud, han sido declaradas en estado de alerta crónica debido a la proximidad de la tormenta tropical Idalia.
La Defensa Civil de Cuba emitió un segundo comunicado a través de su página de Facebook, en el cual afirmó que, de acuerdo con los informes del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología, la tormenta tropical Idalia mantendrá un movimiento lento en las próximas 12 a 24 horas, avanzando hacia el norte y ganando en organización e intensidad, con la posibilidad de evolucionar a huracán durante el día lunes.
La institución también exhortó a la población a mantenerse informada y vigilante ante el desarrollo de la tormenta durante su paso por Cuba. Además, se instó a los ciudadanos cubanos a tomar las medidas necesarias de acuerdo a la situación específica de sus áreas.
«Se recomienda que la población siga de cerca la evolución de este sistema a través de los canales de comunicación nacionales y las cuentas oficiales en redes sociales, y acate de manera responsable las instrucciones proporcionadas por las autoridades locales y la Defensa Civil», señaló la entidad.
En cuanto a México, se encuentra en estado de vigilancia, ya que los meteorólogos prevén que Idalia se fortalezca en huracán el martes en el Golfo de México y luego se desplace hacia el noreste, en dirección a la costa occidental de Florida.
Según los últimos pronósticos del Centro de Huracanes, existe la posibilidad de que Idalia se acerque a Florida el miércoles con vientos alcanzando hasta 160 km/h (100 mph), lo cual corresponde a la intensidad de un huracán de categoría 2.
A lo largo de una amplia franja de la costa oeste de Florida, se espera que el océano pueda llegar hasta 3.4 metros (11 pies) tierra adentro, lo que genera preocupaciones acerca de inundaciones de gran magnitud.
Gran parte de la costa oeste de Florida se encuentra en riesgo de marejadas o inundaciones en caso de aproximarse una tormenta tropical o huracán. Según Jamie Rhome, subdirector del Centro Nacional de Huracanes, esta región de Florida es especialmente vulnerable a las marejadas.
«Por lo tanto, no es necesario que ocurra una tormenta fuerte o un impacto directo para que se presenten marejadas», explicó Rhome. «Quienes estén en cualquier punto de la costa occidental de Florida, desde Fort Myers hasta el noroeste, deben mantenerse atentos».
En Cedar Key, un pueblo pesquero en el Golfo de México, la marejada ciclónica es motivo de preocupación, de acuerdo al capitán A.J. Brown, quien dirige A.J. Brown Charters. La inquietud radica en la posibilidad de que, si la tormenta afecta a Florida en una ubicación cercana al norte, Cedar Key pueda verse afectada por una marejada ciclónica al encontrarse en el extremo sureste de la tormenta.
En relación a Cedar Key, se anticipan olas que podrían medir entre 60 centímetros y 1.5 metros (dos a cinco pies), advirtió Brown, y en caso de que alcancen su altura máxima, «casi toda la zona central quedaría inundada».
En el Bridge Tender Inn en Bradenton Beach, un popular establecimiento donde se presenta música en vivo, es probable que tengan que retirar una gran carpa sobre el bar como precaución ante la posible llegada de Idalia, según lo indicó Shannon Dunnan, subgerente del lugar.
«Si enfrentamos una tormenta fuerte, es posible que la carpa resulte dañada», comentó Dunnan.
No obstante, por el momento, la intención es mantener el negocio en funcionamiento, añadió.
Hasta el momento, no se espera que la tormenta amenace la región suroeste de Florida, donde el huracán Ian impactó el año anterior.
El servicio meteorológico de México emitió una advertencia el domingo acerca de la posibilidad de lluvias torrenciales en la Península de Yucatán y vientos alcanzando hasta 89 km/h (55 mph).