El régimen de Cuba ha incorporado la Inteligencia Artificial (IA) a su repertorio de herramientas digitales, empleándola para reforzar su autoritarismo y vigilar las opiniones de sus ciudadanos. El observatorio ProBox, dedicado a combatir la desinformación en las redes sociales en América Latina, ha arrojado luz sobre esta inquietante práctica.
María Virginia Marín, directora ejecutiva de ProBox, advierte sobre los riesgos de la IA como recurso para manipular contenidos y opiniones en línea. Marín sostiene que esta práctica amenaza la integridad del ecosistema informativo, especialmente en naciones donde el uso de estos recursos se combina con limitaciones y censuras estatales.
El régimen de Cuba ha adoptado esta tecnología avanzada en su intento de moldear conversaciones en las redes sociales y ejercer un mayor control sobre la opinión pública. No obstante, esta muestra de manipulación genera preocupación en la comunidad internacional, sobre todo en aquellos regímenes autoritarios como Cuba, Venezuela, Nicaragua y El Salvador, que están empleando la tecnología para restringir la libertad de expresión y censurar la disidencia.
En Cuba, el Decreto 389 aprobado en 2019 otorga a las autoridades poderes de «vigilancia electrónica», incluyendo la escucha y grabación de voces, la localización y seguimiento de individuos, así como la intervención en comunicaciones. El uso de estas tecnologías para fines de vigilancia y control plantea interrogantes sobre la privacidad y libertad de expresión de los ciudadanos.
En febrero de 2023, el presidente Miguel Díaz-Canel reveló la presencia de la IA en la toma de decisiones gubernamentales en un evento en La Habana. Díaz-Canel señaló que equipos trabajan con la IA para abordar distintas problemáticas y desarrollar soluciones.
La IA, en manos de regímenes dictatoriales, como ha advertido un grupo de expertos, puede convertirse en una herramienta de control y supervisión más invasiva y agresiva que antes. La compañía de ciberseguridad Mandiant, propiedad de Google, ha identificado un aumento en el uso de la IA en campañas de manipulación de información en línea por parte de gobiernos como los de Cuba, Rusia y China.
El uso de estas tecnologías avanzadas para manipular contenidos en redes sociales ha sido evidente en casos anteriores. Ejemplos como la manipulación de información por parte del régimen de Vladimir Putin durante la invasión a Ucrania, o la creación de avatares generados por IA para difundir propaganda en favor de Nicolás Maduro en Venezuela, son testimonios de cómo estos regímenes emplean estrategias para influir y controlar la conversación en línea.