La comunidad de Ciego de Ávila se encuentra en un estado de conmoción ante la triste noticia del fallecimiento de una joven madre cubana de tan solo 31 años. El impacto de esta pérdida ha llegado a los corazones de los residentes de esta provincia, generando reflexiones profundas sobre la fragilidad de la vida y el legado que dejamos tras de nosotros.
Arlettys Luna, según consta en su perfil de Facebook, ocupaba el puesto de directora en la Agencia Viajes Cubanacán en el mismo territorio. Su partida ha dejado un vacío irremplazable en la comunidad, como lo demuestran los sentidos mensajes de despedida que han inundado el ciberespacio.
Compañeros y amigos cercanos a Luna han compartido sus pensamientos y condolencias en línea. Una amiga cercana, Lisbeth Arzola Fadragas, expresó su pesar: «Que dolor Arlettica, yo hoy no podía dormirme sin escribirte, la vida da golpes duros y giros que no entendemos y nos llevan a estar inconformes y nos dejan marcados».
La partida repentina de Luna ha dejado a muchos sorprendidos y conmocionados. Como mencionó Arzola Fadragas, «Te nos fuiste muy rápido y cada uno de los que estudiamos contigo sé que nos sentimos mal y sorprendidos, incluso, nuestro pueblo está estremecido».
La tristeza y el pesar también se extendieron a su familia y seres queridos. «No puedo ni imaginar el dolor de tu mami, tu esposo y tu familia, lo siento mucho mi vida, mi compañera de risas, de bailes, de escuela, de salidas desde el círculo infantil…la vida, que es injusta y nos sorprende de malas maneras», expresó otra amiga en su mensaje de despedida.
Las personas que compartieron momentos valiosos con Luna a lo largo de los años compartieron sus recuerdos y sentimientos en línea. Algunos de sus antiguos compañeros de escuela expresaron su pesar: «Así es. Todos los que compartimos tantos años junto a ella en la escuela hoy estamos de luto también. Descansa en paz Arlettys y sé la luz que guíe la vida de tu mami y tu bebé».
El impacto de su partida no se limitó a su círculo cercano. Personas que la conocieron se unieron en el lamento colectivo: «Que fuerte y duro, desgarra, a Dios fuerzas para esa familia y todos pues de veras ha llegado duro a nuestros corazones».
El recuerdo de Luna también dejó huella en la esfera laboral y educativa. Como afirmó uno de sus conocidos: «Que dolor tan fuerte para todos, considero aún más su familia. Te recuerdo con tu bella sonrisa y sencillez, la alumna integral a todo que tuve como directora. La vida se te hizo corta mi niña que no pudiste disfrutar de tu bebito. Pienso tanto en Carmen esa madre que siempre estuvo para ti que inmenso vacío le dejas».