El miércoles, el dólar estadounidense alcanzó un récord histórico frente al peso cubano (CUP) en el mercado informal, llegando a una tasa de cambio de uno por 250 pesos. Esta cifra es inédita incluso en comparación con el denominado Periodo Especial de la década de 1990 y refleja la crisis económica que azota a la Isla.
Según la tasa representativa del mercado informal que El Toque, un medio independiente, publica diariamente, esta cifra implica un aumento de 20 pesos por dólar en tan solo 14 días.
Justo la semana en que el Gobierno anunció la implementación de su corralito financiero o bancarización, con el objetivo de tomar control de los ahorros de los cubanos y obligarlos a depositar sus ingresos en los bancos estatales, el dólar se cotizaba a 230 pesos cubanos.
«La caída de la moneda cubana refleja el colapso gradual de la economía productiva de la Isla», expresó Bert Hoffman, un experto en América Latina del Instituto Alemán de Estudios Globales y de Área en Hamburgo, a Reuters a principios de este mes.
Además, el euro llegó a 255 pesos cubanos y la Moneda Libremente Convertible (MLC) depositada en tarjeta bancaria alcanzó los 215.
En su análisis de las divisas globales, el economista Steve Hanke de la Universidad Johns Hopkins señaló el domingo que la moneda cubana había experimentado la cuarta mayor devaluación en el mundo, con una caída del 70,37% de su valor desde enero de 2022. En esa fecha, el cambio era de 247 por dólar.
El peso cubano se encuentra en el cuarto lugar detrás del dólar de Zimbabue, el bolívar venezolano y la libra siria en el ranking global de monedas con peor desempeño.
«La espiral de declive económico de Cuba sigue en curso», advirtió Hanke a principios de agosto.
La trayectoria descendente del peso cubano desde septiembre de 2020, cuando la tasa de cambio frente al dólar era un poco más de 1 por 50 pesos, se intensificó a partir de enero de 2021, en línea con la implementación por parte del gobierno cubano de la Tarea Ordenamiento, cuando cayó a 100 por dólar.
La tendencia descendente desde el verano de 2022, con un breve repunte hasta finales de ese año y febrero de 2023 (cuando se estabilizó alrededor de los 150 por dólar), se ha vuelto más pronunciada desde marzo de 2023 y continúa sin freno hasta el día de hoy.
A pesar de esta situación, las autoridades continúan realizando ajustes que empeoran la coyuntura y han reducido el salario mínimo en Cuba (2,100 pesos) a tan solo 8 dólares con 40 centavos.
La debilidad del peso, la moneda en la que la mayoría de los cubanos recibe su salario, socava el poder adquisitivo de las personas. Los salarios en Cuba rara vez superan los 5,000 pesos mensuales, equivalentes a 20 dólares según la tasa de cambio informal.
El costo de muchos bienes importados en dólares también se dispara a medida que el peso se deprecia, aumentando los precios para los consumidores. Esto es especialmente evidente en los mercados de reventa establecidos por las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MIPYMES) autorizadas por el Gobierno, a las cuales solo tienen acceso los cubanos con mayores ingresos o que reciben remesas desde el extranjero.
