En el tejido urbano de La Habana, un lamentable incidente se desarrolló cuando una mujer fue agredida por un hombre aquejado de una enfermedad mental. La comunidad digital fue testigo de este suceso que sacudió la tranquilidad de un barrio habanero.
En una esquina del Paradero del municipio Playa, precisamente en la intersección del CUPET de la calle 146, un individuo con problemas de salud mental protagonizó un acto de violencia contra Ana, una mujer que se encontraba manejando su automóvil. La situación fue compartida en línea por Yamila Arias Benitez Yamy, quien es amiga de la víctima.
La narración de Arias Benitez Yamy detalla que el hombre, con visibles muestras de agitación, se abalanzó hacia el vehículo de Ana y logró introducir su mano por la ventanilla, causándole una fractura en el rostro. El resultado fue una herida que necesitó siete puntos de sutura en una de sus cejas.
En el relato compartido en redes sociales, se resalta que el desenlace podría haber sido aún más desastroso si Ana hubiera perdido la conciencia, lo que la habría dejado incapacitada para controlar su automóvil, con consecuencias impredecibles.
Este individuo, identificado como alguien con un grado de discapacidad mental, ha mostrado un patrón recurrente de violencia y agresión en los alrededores del Paradero de Playa, advirtió Yamila Arias Benitez Yamy.
Los vecinos han denunciado en varias ocasiones agresiones previas protagonizadas por este hombre. La comunidad se pregunta por qué las autoridades y la familia del individuo no han tomado medidas preventivas para evitar estos lamentables incidentes. La situación genera inquietud y cuestionamientos sobre la falta de acciones concretas para prevenir futuros hechos de mayor gravedad.
Este caso se suma a una serie de situaciones similares que han capturado la atención en redes sociales. En junio, ciudadanos habaneros expresaron su preocupación por un paciente psiquiátrico llamado Yoel, quien había estado vagando por las calles de la ciudad y mostraba comportamientos agresivos.
Este individuo, que había agredido a varias personas previamente, se encontraba en las inmediaciones de la zona 8 de Alamar, en el municipio Habana del Este. Pese a haber sido internado en un hospital, se había dado de alta y seguía siendo una preocupación para los residentes de la zona.