En la provincia de Artemisa, el pequeño poblado de Alquízar se convirtió en el escenario de un conmovedor suceso que ha capturado los corazones de miles. Un niño cubano, enfrentando dificultades de movilidad, experimentó una inmensa alegría al recibir un regalo que trasciende la mera materialidad: una playstation. Este sueño hecho realidad fue posible gracias a las donaciones generosas del proyecto «Cristo Cambia Vidas», presidido por el filántropo Limay Blanco.
Un vídeo revelado recientemente por el propio Limay Blanco, quien además es un destacado humorista, capturó el instante exacto en que el pequeño recibió el regalo. La tierna reacción del niño, que quedó perplejo ante el presente, es un testimonio de la transformación que las acciones humanitarias pueden generar en las vidas de aquellos menos afortunados.
Las palabras del niño resonaron profundamente: «Que Dios los bendiga y agradezco mucho al Ministerio Cambia Vidas», expresó con gratitud y emoción. Las lágrimas de alegría brotaron en sus ojos mientras sus labios apenas podían articular la magnitud de su felicidad: «¡Ay abuela, me quedé sin palabras!».
No es la primera vez que este niño conmueve a la comunidad en línea. En publicaciones anteriores, su reacción al recibir una silla de ruedas también dejó huella en el corazón de los internautas. En aquel momento, el niño compartió su ilusión de poseer un «atari». Esta combinación de gratitud y esperanza en la voz de un niño ha reafirmado la relevancia del proyecto «Cristo Cambia Vidas» en la comunidad.
En los últimos años, Limay Blanco ha emergido como un filántropo dedicado, sorprendiendo con su capacidad para resolver problemas y brindar ayuda a familias que luchan en condiciones adversas en la isla. Su proyecto humanitario, impulsado por donaciones generosas, ha logrado proporcionar más de veinte viviendas a familias vulnerables, con la ambición de alcanzar un centenar. Además de las casas, se ha esforzado por entregar electrodomésticos como refrigeradores y televisores a aquellos en necesidad.
Recientemente, Limay Blanco celebró la entrega de dos nuevas viviendas en La Habana. En una festividad emotiva, reunió a las familias beneficiadas hasta el momento, así como a colaboradores frecuentes del «Ministerio Cristo Cambia Vidas».
La casa número 24 fue otorgada a una madre con cinco hijos que anteriormente vivía en un contenedor. La casa número 25, por su parte, se destinó a una madre con nueve hijos, cuyo caso había sido particularmente desafiante para Limay Blanco debido a la dificultad de recaudar los fondos necesarios.
A pesar de sus logros recientes, Limay Blanco anunció su decisión de detener temporalmente las entregas para concentrarse en una gira artística con el objetivo de recaudar fondos para la adquisición de un terreno contiguo a su hogar. Este terreno será el espacio donde se erigirán diversas dependencias para expandir el alcance de su proyecto humanitario «Cristo Cambia Vidas».