Las autoridades de Cancún lograron rescatar a cinco migrantes cubanos que habían sido sometidos a torturas atroces y se encontraban amenazados con una posible ejecución por parte de una banda criminal especializada en el tráfico de personas.
Los acontecimientos tuvieron lugar en la ciudad de Cancún. Los cinco cubanos, en busca de una vida mejor, habían llegado a las costas mexicanas en una embarcación artesanal. Sin embargo, su sueño se convirtió en una pesadilla cuando una banda delictiva los engañó, exigiéndoles una suma mayor de dinero de la acordada para transportarlos hacia la frontera norte de México, según lo informado por el portal de noticias Cambio 22.
El rescate, desencadenado por llamadas al número de emergencia 911 que alertaron sobre el secuestro, no solo puso fin a su tormento, sino que también dejó al descubierto la colaboración y la eficacia de las autoridades en situaciones críticas. Los cubanos habían sido llevados a una casa de seguridad en el Ramal Norte, en las cercanías de la décima guarnición militar de la Guardia Nacional mexicana, tras su arribo a las costas.
Después de haber soportado un angustiante encierro en condiciones inhumanas durante ocho largos días, finalmente fueron trasladados a la zona de la Supermanzana 64, ubicada detrás del conocido Auto Zoom en Benito Juárez, Cancún. La historia que reveló una mujer víctima de esta atroz experiencia es desgarradora; sus glúteos y piernas presentaban heridas causadas por brutales golpizas con tablas y un tubo.
La Fiscalía de Quintana Roo ha iniciando una investigación exhaustiva para recopilar más información y perseguir a los responsables de estos actos repugnantes. A través de estos esfuerzos, se espera que se arroje luz sobre los detalles ocultos de este crimen y se proporcione algún consuelo a las víctimas.
Tristemente, este no es un caso aislado en la región. En meses anteriores, las autoridades mexicanas rescataron a otro migrante cubano que formaba parte de un grupo de 50 personas indocumentadas que habían sido secuestradas en Matehuala, San Luis Potosí.
En un esfuerzo conjunto por abordar esta cuestión, la Fiscalía General de Justicia de Sonora también intervino para liberar a un grupo de migrantes cubanos que habían sido secuestrados en el municipio de San Luis Río Colorado, en el norte de México. Estos migrantes, parte de un grupo de 113 personas indocumentadas, habían sido sometidos a extorsión y mantenidos en cautiverio en una vivienda en la colonia El Mezquite.