El gobierno cubano está tomando medidas audaces para modernizar su sistema financiero y fomentar la adopción de pagos electrónicos en todo el país. En un anuncio realizado hoy, se reveló que las licencias de negocios estarán en juego si no se adoptan las plataformas de pagos electrónicos dentro de los próximos seis meses.
Betsy Díaz Velázquez, Ministra de Comercio Interior (MINCIN), expresó la determinación del gobierno en esta iniciativa, afirmando: “Una de las medidas se centra en garantizar, en el término de seis meses, que en todos los establecimientos comerciales que actualmente operan en la Isla existan las condiciones para el uso, por el cliente, de las pasarelas de pago electrónico nacionales –Transfermóvil, Enzona, Banca Remota– y otras que se desarrollen”.
Esta medida marca un cambio significativo en el panorama financiero de Cuba, ya que busca limitar el uso de efectivo y promover las transacciones electrónicas. La Ministra advirtió que aquellos negocios que no cumplan con esta disposición podrían enfrentar la suspensión de sus actividades al final del período establecido.
«Al término del periodo se procederá con la suspensión de la actividad a los establecimientos comerciales que incumplan lo indicado”, advirtió.
En paralelo, se planea penalizar los depósitos en efectivo realizados por personas jurídicas estatales y comercializadoras minoristas. Esta penalización irá en aumento gradual para aquellos que no logren reducir los montos depositados. En contraste, se incentivarán los pagos electrónicos a través del otorgamiento de comisiones bancarias a medida que se incrementen los servicios de caja extra y el uso de canales electrónicos.
La Ministra subrayó la importancia de integrar los pagos electrónicos en el tejido comercial del país, y declaró que se convertirá en requisito para otorgar certificados comerciales en