La esperada reapertura del parque de diversiones Jalisco Park, en el corazón del Vedado habanero, se produjo finalmente ayer, en una día que estuvo marcado por colas interminables de padres con sus hijos, siguiendo quizás la norma cubana de que escobita nueva barre bien y este tipo de negocios hay que visitar acabados de abrir, pues luego o se rompe un aparato, o no hay corriente o falta alguna pieza para que funcione.
Sin embargo, más allá de las inmensas colas, que provocaron un atraso de casi una hora y tanto en la reapertura, la cual estaba prevista para las 9 de la mañana y terminó ocurriendo cerca de las 10:30 a.m., lo que asombró a muchos de los visitantes fueron los altos precios de la comida que se ofertaba en las instalaciones del lugar.
«Se me ocurrió sentarme a ver si comía algo junto a mis hijos y casi me da un infarto. Imagínate, estábamos en la cola desde las 7 de la mañana para ser de los primeros en entrar, así que ya el mediodía yo estaba desfallecida», nos comentó Elianne Castro, una madre que acudió a disfrutar del parque junto a sus tres hijos.
«Lo más barato de la carta eran los vasos de jugo y costaban 220 pesos cubanos. Una lata de refresco 250, por una pizza de queso casi 700 pesos y una picadera mixta 850 pesos cubanos y se te quedaba en una muela», agregó indignada.
Nuestra redacción tuvo acceso a la carta menú de la cafetería y realmente los precios son como para sufrir un soponcio tropical. Entre los entrantes destacaban la ya mencionada picadera, y el resto de las ofertas en ese apartado rondan entre los 350 y 450 pesos. Las únicas ofertas de comida son sándwich, pizzas, espaguetis y hamburguesas, para las cuales recomendamos llevar un buen saco de billetes pues nada baja de los 500 pesos cubanos.
«Los inflables al mediodía eran un horno, y hasta el reflejo del sol en ellos molestaba. Mis hijos los sintieron tan calientes que me dijeron que no se montaban más. El toro mecánico y la patineta son de los pocos aparatos eléctricos, y para que decirte, no duran nada y son 50 pesos cubanos cada vez que quieres montarlos», se quejó Elianne con nuestro periodista.
Aunque se trata de un negocio ahora en manos privadas, el Gobierno de La Habana tiene sus manos metidas en el asunto, incluso ayudaron a la promoción del lugar y salieron ellos de forma oficial a rectificar el precio de entrada para los menores de edad, el cual se había establecido inicialmente en 50 pesos, al igual que para los adultos.
La Cooperativa No Agropecuaria (CNA) El Pekín, encargada del lugar, ha informado que las principales atracciones del parque son los equipos inflables, que suman un total de 11, con nueve de ellos en uso y dos de reserva.
La entrada al parque tiene un costo de 50 pesos para los adultos, mientras que los niños menores de 15 años tienen acceso gratuito. Además, los equipos inflables tienen tarifas adicionales que oscilan entre 30 y 50 pesos, dependiendo del tipo de atracción.
El proceso de pago se llevará a cabo en la caja central de la unidad, donde se utilizarán fichas de colores con un valor determinado (azul, rojo y verde).
Cada equipo inflable tiene una capacidad para albergar entre 10 y 12 niños, lo que permite que alrededor de 120 a 130 niños se diviertan dentro del parque en todo momento. La duración promedio de los juegos inflables es de 10 a 15 minutos, mientras que los carruseles tendrán una duración de dos minutos. Algunas atracciones se llevarán a cabo por intentos o por caídas.
Además de las atracciones, el parque ofrecerá servicios gastronómicos. Hay una heladería y una cafetería con una variedad de opciones, como pizzas, panes con diferentes rellenos, hamburguesas, espaguetis y bebidas refrescantes. También se dispone de carpas en el área del parque donde se venden alimentos ligeros, como galletas, confituras, panes y rositas de maíz.