Choferes cubanos buscan legalizar las carreras de carros y motos, una actividad prohibida por el régimen desde hace décadas

Redacción

Choferes cubanos buscan legalizar las carreras de carros y motos, una actividad prohibida por el régimen desde hace décadas, con el objetivo de convertirla en un deporte legal y seguro. Estos conductores están tratando de salir de la “clandestinidad” en la que se encuentran y argumentan que la legalización de estas competencias permitiría una mayor transparencia y control sobre las mismas.

El deporte motor en Cuba ha sido históricamente marginado, lo que ha llevado a que las carreras de carros y motos se realicen de forma ilegal en lugares improvisados, fuera del alcance de las autoridades. Los choferes, ante la prohibición, buscan alternativas para satisfacer su pasión por las carreras, llevándolas a cabo en pistas poco adecuadas y sin medidas de seguridad apropiadas.

Recientemente, AP cubrió una carrera efectuada en una antigua pista de aviación en San Nicolás de Bari, municipio de Mayabeque. A pesar de no contar con las condiciones ideales de un autódromo, el evento fue organizado por el Club de Amigos del Motor y contó con oficiales de pista, jueces, una ambulancia y un carro de bomberos para garantizar la seguridad de los participantes y espectadores.

Ariel Camacho, vicepresidente del Club de Amigos del Motor, afirmó que están trabajando para sacar las carreras de la vía pública y brindarles un espacio adecuado donde puedan realizarse de manera controlada y segura. Este enfoque busca prevenir accidentes y promover una cultura deportiva en el país.

En la competencia participaron vehículos como Ladas, Moskvitch y algún Peugeot, así como motos de marcas Jawa, MZ y Suzuki. Aunque los ganadores no recibieron premios en metálico, sí se les entregó una pequeña escultura como reconocimiento.

Sin embargo, es importante destacar que las carreras ilegales de vehículos son consideradas peligrosas, ya que se realizan en condiciones no controladas y pueden involucrar la conducción temeraria y el uso de autos modificados o no aptos para la velocidad. Estas competencias representan un riesgo tanto para los conductores como para los espectadores y otros usuarios de la vía pública.

Recientemente, un impactante video de un accidente ocurrido durante una carrera clandestina de motos en Camagüey salió a la luz, mostrando el momento exacto en que la moto perdió el control y el conductor fue expulsado varios metros hacia adelante del vehículo. Afortunadamente, el conductor sobrevivió, pero la trágica experiencia destaca los peligros asociados con estas competencias ilegales.