Habaneros sufren de la peor escasez de agua en décadas y la situación parece que empeorará

Redacción

Todos los municipios de La Habana están experimentando problemas críticos de abasto de agua, y la situación empeorará con las restricciones adicionales que implementará Aguas de La Habana, la empresa estatal encargada del suministro de agua en la ciudad. Según las autoridades de la empresa, una de las medidas principales para hacer frente a esta situación es extender los ciclos de abasto de agua y distribuir el líquido vital a través de carros cisterna o pipas tanto para la población como para los servicios básicos.

Las limitaciones en el abasto de agua en la capital cubana se deben principalmente a la rotura de equipos de bombeo y a la baja eficiencia de los que están en funcionamiento, así como a las limitaciones en el suministro eléctrico. Actualmente, hay poblaciones afectadas en todos los municipios de la ciudad. En el caso de los municipios abastecidos por la Cuenca Sur, como Cerro, Plaza de la Revolución, 10 de Octubre, Centro Habana y Habana Vieja, persisten las limitaciones debido al déficit en el sistema central, lo que provoca bajos niveles en los tanques y baja presión en el suministro de agua.

En el oeste y sur de la ciudad, se han aumentado los ciclos de abasto a cuatro días en las zonas abastecidas por las fuentes de Cosculluela, Ariguanabo y Paso Seco, y se han realizado instalaciones de equipos, lo que ha permitido una recuperación gradual. Sin embargo, en el este de la ciudad, persiste una situación similar de escasez de agua debido a la rotura y baja eficiencia de los equipos.

Las autoridades continúan monitoreando diariamente la situación y priorizando los escenarios más vulnerables. Sin embargo, esto no satisface a los cubanos que sufren las consecuencias de la falta de agua en medio de un intenso calor y escasez generalizada.

Recientemente, una descarga eléctrica afectó tres bombas en el municipio Boyeros, que forma parte de la estación de abasto de agua de Cosculluela, que suministra agua a los municipios de Marianao y la parte alta de Playa en La Habana. Este incidente complicó aún más el abasto de agua, que ya estaba afectado por otras cuestiones.