Limay Blanco, reconocido humorista cubano, decidió visitar un encantador restaurante cubano junto a su pareja y lo que parecía ser una salida divertida pronto se convirtió en una ocasión para desafiar las tradiciones culturales.
En un video compartido por el humorista, se le puede escuchar decir: «Estoy aquí en un restaurante al que yo invité a comer a la alacrana. Pero tú sabes que el que invita no paga», mientras muestra la deliciosa comida que eligieron.
Entre risas, Limay Blanco comentó cómo el precio de la comida estaba desafiando su creencia de que el que invita no debe pagar. «Mira cómo está esta mesa y mira la cuenta cómo va… ¡Ay alacrana lo que te toca! Y a mí ni me llames porque nada más que yo termine de comer, lo que va a salir corriendo para allá afuera…», bromeó el humorista.
Durante su experiencia en el restaurante, Limay Blanco también hizo mención a un divertido detalle en uno de los platos, donde el cocinero había colocado la palabra «Muñi», un apodo cariñoso con el que suelen referirse a él. «Y miren, el cocinero sacando confianza», comentó el artista entre risas.
Aunque el menú lucía delicioso, la cuenta final ascendía a más de 14 mil pesos cubanos, un precio que está fuera del alcance de la mayoría de la población trabajadora en la isla.
El desenlace de esta divertida aventura no fue revelado por Limay Blanco, pero en los comentarios de la publicación, el restaurante Doña Alicia agradeció la visita del artista y lo invitó a repetir la experiencia en el futuro.
Además de su carrera artística, Limay Blanco se destaca por su labor caritativa en Cuba a través de su organización «Cristo cambia vidas». Este proyecto benéfico ha logrado entregar 23 viviendas a familias vulnerables en la isla, y el objetivo del humorista es llegar a la meta de cien viviendas gracias a las donaciones de personas solidarias.
Limay Blanco demuestra que el humor y la solidaridad pueden ir de la mano, utilizando su fama y recursos para hacer una diferencia positiva en la vida de aquellos que más lo necesitan.