La cubana Amelia Calzadilla ha visitado a su abuela, una anciana de 92 años, en el solar en el que vive en La Habana Vieja. Durante su visita, Amelia ha mostrado las condiciones del edificio multifamiliar que no se ha beneficiado del crecimiento turístico de la zona, lo que ilustra las desigualdades económicas y sociales en Cuba.
Además, Amelia ha aprovechado para poner punto final a la polémica en la que se ha visto envuelta en los últimos días tras recibir críticas desde varios sectores del exilio. Según sus palabras, “quiero cortar la polémica porque es una estrategia muy marcada de la Seguridad del Estado para dividir a las personas que tienen pensamientos distintos”.
Amelia también ha hecho un llamado a la liberación de todos los presos políticos en Cuba. Aunque no conoce a ninguno, se quiere sumar al reclamo y a la petición de que esas personas regresen a sus hogares con su familia. En particular, mencionó el caso de José Daniel Ferrer, cuya esposa se encuentra desesperada por verlo.
Las declaraciones de Amelia sobre la polémica y su petición de liberación de los presos políticos muestran su compromiso con la lucha por los derechos humanos y la democracia en Cuba. Aunque algunos pueden criticar su postura, es importante recordar que el diálogo y el debate son fundamentales para construir una sociedad más justa y equitativa.
En este sentido, es necesario que las personas puedan expresarse libremente sin temor a represalias y que los presos políticos sean liberados. La libertad de expresión y la libertad de asociación son derechos fundamentales que deben ser garantizados en cualquier sociedad democrática.
