Trump se fue a comer pastelitos de guayaba y croquetas cubanas tras comparecer en juicio en Miami

Redacción

El martes por la tarde, el expresidente estadounidense Donald Trump hizo una visita al icónico restaurante Versailles en Miami, luego de comparecer en una corte federal donde se declaró inocente de 37 cargos relacionados con el manejo indebido de documentos clasificados. Durante su visita al restaurante, Trump se reunió con sus seguidores y con la legisladora Ileana García, quien supuestamente organizó el evento.

Un video capturó el momento en el que Trump, sonriente, estrechaba manos y conversaba con sus seguidores que se acercaron para retratarse con él. En medio de la multitud, el exmandatario exclamó: «¡Comida para todos!». Posteriormente, se dirigió a un reportero y le comentó que cree que su comparecencia ante la corte está yendo muy bien. Además, expresó su descontento con el estado del país, calificándolo como corrupto y sin fronteras.

Durante su visita al restaurante, Trump disfrutó de croquetas y café cubano, según una empleada entrevistada por el periodista Javier Díaz de Univisión. Para hacer aún más especial la ocasión, los seguidores del líder político le cantaron el Happy Birthday, ya que al día siguiente cumpliría 77 años. En medio de la celebración, Trump no dejó de expresar su preocupación por un gobierno que considera fuera de control.

Durante su estancia en el restaurante, Trump también tuvo la oportunidad de conversar con dos líderes religiosos cubano-estadounidenses, uno cristiano y otro judío, quienes se turnaron para rezar por él antes de pedir unos pasteles. Entre los presentes se encontraba su ayudante, Walt Nauta, quien también está involucrado en el caso de los documentos clasificados.

Según una fuente cercana al expresidente, Trump decidió visitar este popular restaurante de comida cubana porque es el lugar principal de encuentro de la comunidad cubana en Miami, una comunidad que está familiarizada con la persecución política. Esta no es la primera vez que Trump busca conectar con los votantes a través de visitas a restaurantes y pizzerías durante su campaña en Iowa y Nueva Hampshire.

En cuanto a su comparecencia en la corte federal de Miami, Trump fue imputado de cargos federales por manejo indebido de documentos clasificados. Durante la audiencia, que duró apenas cinco minutos, el expresidente se declaró no culpable de los 37 cargos en su contra. Sus abogados expresaron su desacuerdo con los cargos presentados. El juez no le exigió entregar su pasaporte ni restringió sus movimientos dentro o fuera del país. Aunque no se le impuso una fianza, se le puso en libertad condicional con la condición de no tener contacto con los testigos del caso.