En la madrugada del martes, la familia del sacerdote Leandro NaunHung fue víctima de un violento asalto en su hogar en Santiago de Cuba. Ante la noticia, el sacerdote utilizó sus redes sociales para compartir el estado de salud de sus padres y agradecer todo el apoyo recibido en estos momentos difíciles.
Afortunadamente, según informó NaunHung, las lesiones de su madre no son graves y su padre ya se está recuperando después de haber sido intervenido quirúrgicamente en el hospital. «No parece haber afectado de gravedad el impacto en la cabeza pero queda bajo observación su evolución posterior», explicó el sacerdote.
En su mensaje, el sacerdote también destacó la importancia del amor y la solidaridad en la comunidad en línea. Según él, podemos «convertirnos en tejedores de comunión» a través de la compasión y el acompañamiento que brindamos a través de las redes sociales. «Podemos imaginar nuevos modelos de comunicación basados en la confianza, la transparencia y la solidaridad», agregó.
Además, NaunHung señaló cómo la distancia geográfica se acorta gracias a un mensaje usando el teléfono. «Hemos aprendido a estar presentes al estilo de Dios a quien no vemos, pero sabe deja sus señales en nuestra vida», dijo el sacerdote.
La comunidad en línea también desempeñó un papel clave en estos momentos difíciles para NaunHung y su familia. El sacerdote agradeció a sus amigos y personas de buena voluntad que, a través de las redes sociales, lo acompañaron, oraron, animaron y fortalecieron con cientos de mensajes llenos de amor y fe pidiendo por su familia.
Esta experiencia nos recuerda la importancia de la comunidad en línea y cómo podemos utilizar las redes sociales como herramientas para compartir amor y apoyo en tiempos difíciles. Como señaló NaunHung, el «amor al prójimo» también es posible en la esfera digital.
Tras lo ocurrido, el arzobispo de Santiago de Cuba, Monseñor Dionisio García, emitió un comunicado condenando la ola de violencia en la isla. «Pidamos también a Dios para que esta escalada de violencia, y la difícil situación que estamos viviendo, se aparten de nuestro pueblo, que la vida honesta y segura que necesitamos y merecemos, se adueñe de nuestras ciudades y hogares», dijo García.