Los cubanos continúan expresando su preocupación por los altos precios que no paran de subir, afectando cada vez más sus maltrechos bolsillos. En esta ocasión, el incremento desmedido se ha dado en el precio del paquete de pollo de 10 libras.
Rodolfo Luis Doval compartió su descontento en Facebook: «No quisiera seguir actualizando precios, sobre todo para aquellos de nosotros que habitamos en lo que en algún momento fue el maravilloso Vedado. En cualquier momento me citan a algún lugar, pero como no estoy faltándole el respeto a nadie, aunque me lo estén faltando a mí y a todos los que vivimos en este país, no me queda más remedio».
Doval continuó: «De esta forma, estarán advertidos y deberán llevar el doble de dinero cuando compren algo. Atención Vedado: el paquete de pollo de 10 libras que costaba hace unos días 3000 y luego 3100, ahora mismo lo acabo de comprar por 3624 pesos cubanos (CUP)».
El usuario enfatizó: «Repito: tres mil seiscientos veinticuatro pesos».
Además, expresó su frustración al mencionar: «No menciono el lugar exacto porque repito que no creo que los vendedores sean los culpables de estos precios crecientes. Esto ya no tiene nombre, ya se ha salido de control».
Otros cubanos también lamentaron el elevado precio de un alimento tan indispensable como el pollo. Algunos comentarios expresaron: «En una MIPYME de Neptuno están a 3500 pesos. Y todavía son carísimos»; «es un abuso, un verdadero abuso al pueblo de Cuba» y «hermano, tenemos que conseguir una máquina para imprimir billetes, no hay otra opción».
Un usuario atribuyó la situación a las decisiones económicas de Marino Murillo y Alejandro Gil, señalando: «El resultado del trabajo de Murillo y Gil, los arquitectos económicos con sus medidas astutas y su reordenamiento económico, ha llevado a una situación desastrosa con inflación descontrolada. Todo lo que han hecho es un monstruo diabólico creado por estos señores, convertidos en los artífices e inventores de esta crisis, y los demás que se sientan en la Asamblea son títeres que simplemente levantan la mano para aprobar lo que ya está decidido».
El descontento continuó con otro comentario: «A ellos no les importa nada, ni siquiera los jubilados. Han estado hablando de lo mismo durante años y dicen estar conscientes de los precios que cobran los particulares y los salarios de los trabajadores y jubilados, pero todo se ha convertido en meras palabras y cuentos, mientras los precios siguen aumentando día tras día. Personalmente, ya no creo en nada de lo que dicen, me han obligado a no creer», expresó un cubano decepcionado con los dirigentes.