Un taxista privado en La Habana, ha salido en defensa de los altos precios que cobra por los pasajes en medio de la aguda crisis que enfrenta la isla. Según el chofer, la gasolina la está comprando a un elevado precio en el mercado negro debido a la escasez y largas colas en las estaciones oficiales. Además, menciona los altos precios de los alimentos y otros recursos necesarios para su trabajo.
En palabras del chofer al portal oficialista CiberCuba: «La gasolina la estoy comprando a 500 pesos el litro por la izquierda porque no tengo tiempo para pasarme tres días en una cola, y esos 40 litros que me venden no me alcanzan ni para dos días. Y la caja de pollo me cuesta 8,000 pesos, la libra de arroz, 150, la libra de mango a 50, la bolsa de leche a 1500 a una mipyme. Imagínate, tengo que cobrar más, todo es una cadena, no voy a morirme de hambre ni trabajar por gusto».
Otro transportista privado, con seis años de experiencia, menciona los impuestos a la ONAT y los altos costos de repuestos y servicios de reparación. Además, destaca las largas colas virtuales para obtener combustible y el hecho de que muchos choferes no son propietarios de los vehículos, teniendo que pagar un porcentaje del alquiler al dueño.
A pesar de las dificultades que enfrentan los taxistas privados, el artículo oficialista critica su actitud y señala que los pasajeros no son responsables de la situación. El autor del artículo expone: «Las excusas de los transportistas privados por la subida de los precios son que se pasan cuatro días en la cola de un Cupet, o que pagan el combustible veinte veces por encima de su valor oficial. El pasajero, el trabajador que lleva tres horas en la parada y le urge llegar a su casa, y otros que necesitan moverse hasta el hospital para un turno médico, por ejemplo, no tienen la culpa de esa situación. No se puede aplicar la ley de la selva y que se salve quien pueda».
El artículo también hace mención a las recientes multas impuestas a los choferes por cobrar precios excesivos. Se detallan los precios establecidos para diferentes destinos y se subraya que estos pueden incrementarse en horario nocturno. Además, se destaca que los bicitaxis también se ven afectados por esta situación.
La realidad de los taxistas privados en Cuba refleja los desafíos y dificultades a los que se enfrentan en medio de la crisis económica que atraviesa el país. Mientras tanto, se espera que se encuentren soluciones que permitan un equilibrio entre el transporte estatal y el privado, así como un control efectivo para garantizar tarifas justas y accesibles para los usuarios.