En busca de una vida mejor, muchas personas deciden emprender un peligroso viaje hacia Estados Unidos. Sin embargo, este sueño puede cobrar un precio muy alto, como le ocurrió a una madre cubana que perdió a su hijo de 17 años en México. En medio del dolor y las lágrimas, la mujer relata cómo la búsqueda de un futuro prometedor se convirtió en una tragedia que marcará a su familia para siempre.
La familia había realizado la travesía desde Cuba y estaba en espera del parole humanitario en México cuando una banda de criminales los secuestró.
El hijo mayor y el marido de la cubana intentaron frenar el avance de los malhechores mientras ella se refugiaba con su hija pequeña en el baño. Sin embargo, la situación se volvió violenta y los secuestradores dispararon, causando la muerte del joven y dejando al esposo gravemente herido.
La madre describe el trauma que su hija pequeña experimentó al presenciar la muerte de su hermano. A pesar de que lograron cruzar la frontera hacia Estados Unidos, la niña sigue sufriendo las consecuencias de aquel fatídico día. Esta historia es solo una muestra de los peligros que enfrentan los inmigrantes en su camino hacia un futuro mejor.
El abogado Jesús Novo explica que en México, los grupos delincuenciales se aprovechan de la precariedad de los inmigrantes para secuestrarlos y estafarlos. Muchas veces, las personas que realizan este peligroso viaje tienen que enfrentarse a situaciones extremadamente violentas que ponen en riesgo sus vidas y las de sus seres queridos.
Además, como menciona el cubano entrevistado por la prensa mexicana, los grupos de personas son más vulnerables a los robos y asaltos. Por eso, es recomendable hacer el recorrido solo, aunque esto también implica mayores riesgos para la integridad física y emocional de los viajeros.