Comienza la demolición del edificio de viviendas que estaba al lado del Hotel Saratoga

Redacción

Una densa nube de polvo se alzaba el día de hoy de entre los escombros que rodean al antiguo Hotel Saratoga en La Habana. El edificio, ubicado en la calle Prado número 609, fue testigo de la devastadora explosión ocurrida el 6 de mayo de 2022, en la cual lamentablemente perdieron la vida 47 personas. Ahora, con la ayuda de maquinaria pesada, se están llevando a cabo las tareas de demolición.

El imponente brazo de una gigantesca pinza demoledora, de un intenso color rojo, se encarga de derribar las paredes y columnas del inmueble con sus poderosas tenazas. Los fragmentos de concreto caen despedazados al suelo mientras que los curiosos se aglomeran en el Parque de la Fraternidad, respetando el perímetro de seguridad marcado por una cinta roja.

Los residentes de La Habana reconocen que esta misma máquina, o una muy similar, protagonizó la demolición del restaurante Moscú en marzo de 2022, situado en pleno Vedado. También recuerdan que tras el derrumbe de la chimenea de la termoeléctrica Antonio Guiteras en Matanzas el pasado 7 de abril, las autoridades utilizaron una herramienta similar durante la «remodelación» del Hotel Saratoga para rescatar a los trabajadores atrapados en medio del hollín. Sin embargo, de los cuatro obreros que esperaban el rescate, solo dos lograron sobrevivir.

Demolición de edificio de viviendas al costado del Hotel Saratoga.

Posted by Takashi Hirabayashi on Monday, May 15, 2023

Los vecinos de Prado 609 ya conocían los planes del gobierno de demoler el edificio y, según lo prometido, construir nuevas viviendas en su lugar. No obstante, esto no sucedió con las víctimas de otro inmueble ubicado en la calle Zulueta, quienes fueron reubicados en casas de hormigón fundido en la «conflictiva» calle Vives.

La polvareda que se eleva hoy en día, traspasando la cerca roja de zinc que limita el acceso a peatones, evoca el día de la explosión. Después del accidente, del cual el gobierno aún no ha publicado las conclusiones de la investigación, el edificio de Prado 609 fue saqueado por ladrones que se apropiaron de cualquier objeto, desde muebles hasta alimentos.

Se espera que Almest, la inmobiliaria de las Fuerzas Armadas encargada de las obras, colabore en la reconstrucción del edificio junto a una empresa francesa cuyo nombre no ha sido revelado por el gobierno. Sin embargo, todo parece indicar que se trata de Bouygues, una empresa que ya ha participado en la construcción de una veintena de hoteles en Cuba.

Un año después de la explosión que sacudió una de las zonas más céntricas de La Habana, situada frente al Capitolio Nacional, los edificios afectados continúan esperando una reparación integral. La reconstrucción se ha vuelto una tarea urgente para devolverle a esta área de la ciudad su esplendor y seguridad perdidos.