El ingenio y la creatividad del pueblo cubano son verdaderamente admirables. En medio de la escasez de combustible que vive el país, una pareja de cubanos decidió casarse en un carretón de caballos y salir a las calles a celebrar su amor. El hecho fue compartido en las redes sociales por Yaquirurbis López Pellicier, quien quedó asombrado por lo que estaba viendo.
El video muestra a la pareja festejando en la carreta mientras las personas pasan, se detienen, observan y reaccionan ante el insólito hecho. En el audiovisual, se escucha a un cubano manifestar su asombro: “No hay gasolina en Cuba. Ahora sí esto está bueno. Una boda a caballo en pleno siglo 21 en Cuba”.
Las reacciones en el ciberespacio no se hicieron esperar. Usuarios de las redes sociales dejaron comentarios como “La gasolina está perdida”, “Oyeee no hay gasolina, qué más quiere, se hace la boda porque sí y punto” y “Se fueron virales”. Sin duda, el ingenio de los cubanos ante la crisis de combustible es admirable.
Pero este ingenio también puede ser peligroso, como es el caso de un grupo de cubanos en la provincia de Las Tunas que comenzó a producir gasolina de manera artesanal. En un video compartido en las redes sociales por Dairon Matos, se explica cómo se produce la gasolina a base de plástico.
Este proceso es altamente peligroso y puede ocasionar accidentes tanto en la fabricación como en su uso en los vehículos. A pesar de los riesgos, los cubanos han encontrado una forma de adaptarse a la crisis de combustible que están viviendo.
En la isla, las personas llevan semanas haciendo largas colas en las gasolineras para intentar comprar algo de combustible. Además, los apagones han regresado con fuerza, lo que agrava aún más la situación de crisis energética. Las autoridades cubanas reconocen que no pueden resolver el problema a corto plazo.
El dictador Miguel Diaz-Canel explicó que el déficit de gasolina se debe a que varios de los países que tienen contrato con Cuba están atravesando situaciones energéticas complejas y no han podido cumplir con los compromisos contraídos. Esto ha llevado a que el consumo diario de gasolina en el país haya bajado de 500-600 toneladas a menos de 400 toneladas, lo que ha afectado todas las actividades del país.
En cuanto al diésel, la situación es diferente. A pesar de las situaciones coyunturales, se tenía garantizado el embarque que aseguraba la continuidad del suministro. Sin embargo, el barco que transportaba el diésel se rompió en Santiago de Cuba, lo que impidió que se pudiera distribuir a tiempo a otros puertos del país. Esta situación ha producido un atraso en la distribución del combustible en todo el territorio.